Endesa, filial de la italiana Enel, ha presentado este miércoles sus cuentas trimestrales, con una caída del beneficio del 50% -más concretamente del 51%- frente al primer trimestre de 2023. Un resultado que ha llevado a la eléctrica, dependiente de la energética pública italiana, a desplomarse en bolsa en el mismo momento de la apertura del Ibex 35. Los títulos de Endesa pierden más de un 1,60% de su valor en los primeros momentos de la sesión bursátil, dejando la acción a un precio de 17,34 euros por acción. Una reacción negativa del mercado y los inversores tras presentar la compañía un beneficio ordinario neto de 292 millones de euros al cierre del mes de marzo, un 51% menos que en el mismo periodo de 2023.

La eléctrica ha comunicado sus resultados financieros trimestrales a la CNMV antes de la apertura del mercado, como viene siendo habitual. Unas cuentas que reflejan una caída del beneficio en el arranque del año y que la italiana explica por la comparativa frente al primer trimestre del ejercicio anterior, cuando se registraron impactos positivos derivados del contexto de mercado. En base a las cuentas presentadas esta mañana por la compañía, el resultado bruto de explotación (EBITDA) de Endesa ha cerrado el primer trimestre en los 1.079 millones de euros. Una cifra que lleva consigo también una caída del 26% frente a los 1.462 millones de euros registrados en el primer trimestre de 2023, un récord histórico de EBITDA en un primer trimestre del ejercicio para la eléctrica. 

La italiana explica la caída del beneficio trimestral tanto por la disminución del EBITDA como por el impacto del impuesto extraordinario del 1,2% sobre ventas al sector que, tal y como reitera en sus cuentas presentadas este miércoles,"no es deducible". Según consta en la presentación remitida a la CNMV a primera hora de la mañana, Endesa ha pagado 202 millones de euros por el gravamen extraordinario en el primer trimestre de 2024, 6 millones menos que los 208 millones de euros que desembolsó en el mismo periodo del ejercicio de 2023. Todo ello a la espera de lo que ocurra con el futuro del impuesto a los beneficios caídos del cielo de las energéticas, que nació como una medida temporal y parece que se convertirá en permanente. 

El consejero delegado de Endesa, José Bogas, ha aprovechado la presentación de las cuentas financieras del primer trimestre para hacer un nuevo llamamiento a la actualización y mejora de la regulación de la distribución eléctrica, una infraestructura que la italiana considera "crítica" para la transición energética actual. “La gestión de la situación de volatilidad en el mercado es clave para la sostenibilidad de nuestro negocio y la recuperación de la senda de crecimiento. Nuestra estrategia integrada proporciona protección a nuestro negocio liberalizado, al tiempo que crea valor de forma constante para nuestros accionistas. En el capítulo regulatorio, me gustaría recordar una vez más que una remuneración justa es necesaria para el negocio de distribución eléctrica, que permita incentivar las inversiones. Sin redes bien dimensionadas y resilientes, la transición energética no será posible”, mantiene el CEO de la filial del gigante público Enel. 

Endesa confirma objetivos a pesar de la caída del beneficio

A pesar de la caída del beneficio y del EBITDA en tasa interanual, la italiana ha reiterado los objetivos presentados a analistas e inversores en el último Capital Markets Dayreafirma su compromiso para alcanzar dichas cifras al cierre del año. En cifras puramente financieras, el flujo de caja de Endesa ha cerrado el primer trimestre en positivo, con 167 millones de euros, a pesar del impacto del "pago del laudo arbitral en el gas", tal y como explica en sus cuentas trimestrales.

Asimismo, la italiana -dependiente de Enel- ha mantenido sus cifras de inversión estables en el primer trimestre del año frente al ejercicio anterior. En total, ha destinado 412 millones de euros en el arranque del año, con el 70% del total dedicado a redes y renovables. Endesa defiende en sus cuentas su inversión en transición ecológica y energía renovable y asegura ahora que el 90% de la producción peninsular del primer trimestre ha estado libre de emisiones, con una mejora de siete puntos más que en el primer trimestre de 2023. En total, ha logrado una capacidad renovable de 10.000MW al cierre del mes de marzo tras sumar 700MW en términos interanuales.

Entre otros hechos relevantes de este primer trimestre del año, la eléctrica asegura encontrarse en la fase final del proceso de venta de un 49% de su cartera de plantas solares en funcionamiento, lo que le permitirá mantener el control sobre un activo que considera estratégico en un modelo de negocio de compañía eléctrica verticalmente integrada. Por otro lado, asegura que la normalización de los márgenes de electricidad y gas en el arranque de este año, unida a la política de venta por anticipado de la electricidad y el gas a suministrar a clientes, le permite proteger sus márgenes ante una coyuntura de precios que la italiana define como "históricamente bajos del mercado".

Y es que la eléctrica defiende que el ejercicio 2024 ha arrancado con una situación de progresiva normalización del mercado energético tras las "extraordinarias circunstancias" del ejercicio anterior. Para ello, la compañía hace referencia al cambio de tendencia, con una caída de los precios de la electricidad del 53% por una coyuntura de alta producción renovable, especialmente hidráulica, y una demanda débil.