Inditex, Primark, H&M y Uniqlo, gigantes del comercio textil, lanzan una nueva patronal de cara a negociar los convenios colectivos del sector con los sindicatos. La Asociación Retail Textil España (ARTE), nombre elegido, contempla en sus estatutos de constitución excluir a las pymes para defender sus intereses de forma independiente. La estrategia utilizada es el establecimiento de criterios severos que la mayoría de pequeñas y medianas empresas no pueden cumplir.

Concretamente, se establecen tres requisitos, de los cuales será de obligado cumplimiento al menos dos. Uno de ellos, quizá el más excluyente, es contar con una superficie de venta física de más de 3.500 metro cuadrados a nivel nacional. El segundo contempla la obligatoriedad de contar con tiendas físicas en, al menos, tres comunidades autónomas. Por último, se exige también que la plantilla supere los 400 trabajadores. No obstante, existen dos excepciones para las empresas que no consigan cumplir dos de estos requisitos.

Si existe una empresa que no alcance el mínimo, pero, a su vez, pertenece a un grupo empresarial más grande que sí, se entenderá que cumple los requisitos. Además, a la patronal podrán sumarse aquellas empresas que, a pesar de no cumplirlos, compartan intereses generales con la asociación y reciban el visto bueno de la asamblea general. Por el momento, lo socios son Inditex y todas sus filiales (Zara, Pull & Bear, Massimo Dutti, etc.), H&M, Primark, Uniqlo y algunas cadenas deportivas (Sport Zone, JD Sport y Sprinter).

Huelga para las rebajas de enero

Esta patronal se constituye antes de la próxima negociación que se tendrá que abordar con los sindicatos, enfrentados entre ellos, y la convocatoria de huelga prevista para las rebajas de enero. CGT, ha convocado una huelga en Inditex para el próximo sábado 7 de enero, primer día de las rebajas de enero, a la que llama a todos los dependientes de la compañía de la Comunidad de Madrid.

No obstante, la convocatoria no es compartida por el conjunto de sindicatos, lo que está produciendo una guerra de acusaciones cruzadas. Los dos sindicatos mayoritarios a nivel nacional, también dentro de Inditex, CCOO y UGT, han rechazado la huelga y han ensalzado el acuerdo alcanzado con la compañía de Amancio Ortega la pasada semana. Por el contrario, CGT, sindicato mayoritario de Zara, Pull&Bear, Lefties y Kiddy's Class en la Comunidad de Madrid, no prevé frenar sus protestas y considera el acuerdo firmado como insuficiente. Situación similar a la que se ha dado en A coruña, donde la Confederación Intersindical Gallega (CIG), también sindicato mayoritario de la marca en su territorio, ha mantenido las protestas a pesar del acuerdo firmado.

Convenio firmado que no convence

A finales de noviembre, Inditex alcanzó un acuerdo con CCOO y UGT basado, básicamente, en incentivos por venta. Después de múltiples negociaciones, las organizaciones sindicales definieron puntos comunes con el gigante de la moda, que ha aceptado ofrecer incentivos ligados a las ventas, que ya existían en las tiendas de la marca, pero fueron eliminados con motivo de la pandemia. Ahora se recuperan y doblan su cuantía hasta los 1.000 euros. Además, el acuerdo contempla una mejora del plus sede, que solo afecta a los dependientes de A Coruña.

Más allá, Inditex ha asumido el compromiso de implicarse en el desbloqueo de los convenios autonómicos y provinciales, ya que la compañía negocia por territorios y no por sector, y la actualización de los salarios. No obstante, esto no convence ni a CGT ni a CIG, que piden subidas reales de los salarios y mejoras de las condiciones, no incentivos ligados a las ventas o pluses. Según datos de los sindicatos, el 57% de la plantilla de Inditex está acogida a un convenio sin renovar, lo que congela sus salarios.

Por su parte, CCOO defiende lo conseguido y asegura que los incentivos establecidos “palian los efectos” de la pérdida de poder adquisitivo. “Es un conflicto ficticio. Se está negociando el convenio en estos momentos”, apunta a este periódico Ángeles Rodríguez, representante de CCOO en materia de comercio, en relación con el conflicto de A Coruña. Sobre Madrid, asegura que el convenio textil sigue vigente, aunque “se acaba este año y el año que viene habrá que negociarlo”.