Google da marcha atrás y suspende la vuelta obligatoria de sus empleados a las oficinas, prevista para el próximo 10 de enero de 2022. Así lo desvela la cadena norteamericana CNBC a partir de un correo electrónico remitido a la plantilla en Estados Unidos, en el que el gigante tecnológico se emplaza al próximo año para evaluar la situación sanitaria.

El comunicado no revela los motivos, sino solamente una futura evaluación de la situación sanitaria por la pandemia de coronavirus, pero estaría relacionado con los niveles de incidencia en el país norteamericano.

El vicepresidente de Seguridad de Google, Chris Rackow, comunica a los trabajadores en este correo electrónico que ninguno de los centros de trabajo que la compañía tiene en Estados Unidos adoptará el mandato de trabajo híbrido obligatorio a partir del próximo 10 de enero, en apenas un mes, tal y como había planeado inicialmente el gigante tecnológico. 

Así, la compañía permitirá que ubicaciones específicas sean quienes decidan sus cronogramas para la vuelta a las oficinas de sus plantillas locales. Para ello, los “equipos de respuesta a incidentes locales” de Google ayudarán a determinar “el nivel de riesgo” de cada oficina.

Un mes de adaptación al trabajo híbrido

Rackow ha animado a sus trabajadores a que vuelvan a conectar de forma personal con sus compañeros de trabajo “donde las condiciones lo permitan”. Además, la compañía ofrecerá a todos los empleados que lo necesiten un periodo de 30 días para hacer la transición al formato de trabajo híbrido.

A día de hoy, Google ha abierto el 90% de sus oficinas en Estados Unidos, en las que ya han regresado al trabajo casi el 40% de sus empleados. El comunicado de uno de los portavoces de Google explica que el gigante digital continuará determinando en qué momento reabrir las oficinas y comenzar con la semana laboral híbrida, "en función de las condiciones locales, que son dinámicas y varían mucho entre ubicaciones".

La popularización del teletrabajo entre los empleados de Google ha supuesto una mejora del 17% del beneficio para Alphabet, la empresa matriz de la compañía, con un beneficio neto de 40.269 millones de dólares en 2020.