El pasado lunes la Fiscalía Anticorrupción y el juez encargado del caso Villarejo, Manuel García Castellón, pedían la imputación de los exjefes de seguridad de Repsol y La Caixa en el caso por su supuesta relación con Grupo Cenyt, la sociedad del ex comisario, para espiar a Luis del Rivero, presidente de Sacyr Vallehermoso.

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Solo unas horas después, en la tarde del martes, el juez citaba como investigados a ambos directivos para investigar el espionaje a del Rivero entre 2011 y 2012. Se trata del exdirector de seguridad corporativa de Repsol, comisario en excedencia Rafael Araujo; y al exdirector del área de seguridad de CaixaBank, el comisario jubilado Miguel Ángel Fernández Rancaño. ElPlural.com se ha puesto en contacto con ambas compañías, que declinan hacer declaraciones.

Además, la Fiscalía también ha pedido la imputación del propio José Manuel Villarejo, de su socio Rafael Redondo y de Rafael Girona, segundo de Araujo, exjefe de seguridad de Repsol. La pieza 21 del caso investiga el Proyecto Wine, encargado supuestamente para “salvaguardar los intereses” de Repsol y CaixaBank.

Según la Fiscalía, ambas compañías “aparecen como aliados empresariales en un contexto de pugna entre accionistas de referencia en Repsol YPF para tomar el control de la compañía". El conflicto tiene su origen en que Luis del Rivero, presidente de Sacyr Vallehermoso, pretencía asociarse con la compañía petrolera Petróleos Mexicanos (Pemex) para hacerse con “casi un tercio” de las acciones de Repsol y así poder acceder al control de la petrolera española.

Ante esto, Repsol habría paralizado “de manera temporal” el plan de del Rivero, con ayuda de Caixabank, para retirarlo de la presidencia de Sacyr, al igual que a su hijo y un estrecho colaborador. Además de al directivo, las compañías habrían encargado investigar a su mujer, Natividad Martínez; al exjefe de seguridad de Sacyr, Rodrigo Álvarez y al exdirector financiero de Repsol, Fernando Ramírez.

"Los servicios de investigación contratados se ejecutarían durante los últimos meses del año 2011 y durante la primera mitad del año 2012", según el auto de la Fiscalía Anticorrupción. En concreto, se han detectado siete abonos en dos cuentas diferentes de Cenyt, cuatro con cargo a Repsol y tres con cargo a CaixaBank. Del total de los 413.600 euros abonados, 218.900 euros se abonan con cargo a la primera y 194.700 euros a la segunda.