El empleo continúa avanzando positivamente y ha cerrado el primer cuatrimestre marcando los mejores datos de su historia. La Seguridad Social ha sumado 128.824 afiliados más en abril en términos desestacionalizados -eliminados los efectos del calendario- y, en suma con los tres meses anteriores, cierra el periodo enero-abril con 420.301 ocupados más. Ambas cifras suponen la mejor cifra de la historia desde que se cuentan con registros de datos, tanto para la creación de empleo de un mes de abril como para la creación durante los primeros cuatro meses de un año. Además, la cifra total de afiliados a la Seguridad Social supera por primera vez los 20,6 millones (20.661.195) y en 1,2 millones los datos de antes de la pandemia.
A los datos publicados por la Seguridad Social se suman los que ha dado a conocer el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) sobre desempleo. Estos muestran que el paro también ha marcado un buen mes con una reducción de sus filas de 73.890 personas. No obstante, en términos desestacionalizados, al obviar los efectos de la Semana Santa, el número de desempleados cae en el cuarto mes en 2.646 personas. Desde que comenzó el año, las cifras de paro se han reducido casi en 50.000 personas, pasando de los 2.837.653 con los que se cerro el pasado año a los 2.788.370 actuales (-49.283), mejor cifra en 15 años (2008).
Los datos de afiliación (+128.824) y paro (-2.646) del mes de abril muestran cifras muy positivas incluso eliminado los efectos positivos para el empleo de la Semana Santa. De hecho, si no se descuentan los efectos del calendario y se atiende a la serie original, el número de afiliados a la Seguridad Social en abril ha crecido en casi un cuarto de millón (238.436) y el paro se reduce en 73.890 personas en abril y 234.133 en un año. No obstante, más allá de la fórmula elegida para medir los datos, pues ambas muestran una gran progresión del mercado de trabajo, otro dato determinante es la calidad y el tipo de empleo creado, que vuelve a mostrar un gran avance de los indefinidos.
4 de cada 5 son indefinidos
Los efectos de la Reforma Laboral siguen dejando su rastro y, tras casi año y medio de su aprobación, cuatro de cada cinco afiliados (86%) disfrutan de un contrato indefinido. En el cuarto mes del año la temporalidad se ha mantenido en la ya más que habitual cifra mínima histórica del 14%, alejada del 30% previo a la nueva normativa laboral. Además, en el caso de los menores de 30 años, sector especialmente castigado por este tipo de contratación, la temporalidad se ha reducido en ya en 32 puntos respecto al nivel que tenía antes de la reforma, pasando del 53% al 21%.
Lo datos son especialmente positivos para los más jóvenes (menores de 25 años), entre los que el desempleo desciende en el mes de abril en 19.848 personas (-9,23%) respecto al mes anterior, un ritmo de bajada que triplica al -2,6% del paro general. Con 195.251 personas jóvenes en paro, se registra la cifra de paro juvenil más baja de toda la serie histórica, otro récord que se suma a todos los demás marcados en este primer cuatrimestre.
En conjunto, ahora hay casi 2,9 millones de afiliados más con contrato indefinido que en diciembre de 2021, el último mes antes de la entrada en vigor de la reforma. Otro indicador que señalan desde la Seguridad Social como muestra del incremento de la estabilidad es el aumento de la duración media de los contratos que han causado baja. Entre enero y abril de 2023, esta variable ha crecido en 62 días en comparación con las cifras del mismo periodo de 2019, último año homologable anterior al impacto de la pandemia.
De los 4,1 millones de afiliados que tenían un contrato temporal en el primer trimestre de 2022 y siguen en alta, el 53% (2,2 millones) son indefinidos en abril de 2023. La mayoría, 1,8 millones son indefinidos ordinarios, y 394.000 son fijos discontinuos, dato que deja claro que la retahíla de la derecha basada en negar los datos aludiendo a los fijos discontinuos no se sostiene. Los sectores donde más temporales han pasado a ser fijos en abril son el Comercio y Reparación de Vehículos, la Hostelería, la Construcción y la Industria Manufacturera.
Crecen los sectores estratégicos
Otro de los datos relevantes del mercado laboral son los sectores en los que se está creando empleo. Alejándose de la histórica creación de empleo en sectores turísticos y enmarcados dentro de los Servicios, los ámbitos con alto valor añadido avanzan notablemente. La Informática y Telecomunicación ha engrosado sus afiliados en un 21,6% con respecto a antes de la pandemia, seguida de las Actividades Profesionales, Científicas y Técnicas, que presenta un crecimiento del 12,8%. Uno de cada cuatro nuevos afiliados se ha incorporado a estos sectores altamente productivos desde que finalizó la Covid-19.
A nivel de paro, todos los sectores económicos han reducido sus cifras entre abril y marzo. En el sector de Servicios en 52.216 (-2,56%), Industria 5.391 (-2,36%), Agricultura 4.296 (-3,79%) y en Construcción 4.014 (-1,84%). Además, el colectivo Sin Empleo Anterior, que sufre en mayor medida la precariedad y las complicaciones para sumarse al mercado, este mes ha experimentado una reducción de sus cifras de desempleo de 7.973 personas (-3,05%).
