En los últimos años hemos visto como nuestro querido estado de bienestar desaparecía con la llegada de la crisis.
Ya llevamos unos años sufriendo el azote de una crisis económica que no esperábamos y que al que más y al que menos le ha afectado en su modo de vida. La clase media ha ido despuntando hacia un lado o hacia el otro, y los que tiran hacia abajo, ven que su economía se desborda y ahorrar es cada día más difícil.
Lo bueno de toda situación por muy negativa que sea es que siempre podemos aprender cosas nuevas, y si estamos pasando por un bache en el que nos resulta más complicado hacer frente a ciertos gastos, podemos conseguir aplicarnos unos trucos para tener un colchón y poder responder a nuestros imprevistos.