El presidente de Repsol, Antonio Brufau, ha advertido en Bruselas del riesgo de deslocalización de la producción industrial europea y de la amenaza que representa para las economías del Viejo Continente.

En su intervención en la inauguración de la quinta edición de las conferencias 'Energy for Europe', organizadas por Repsol, Brufau señaló que la industria en Europa ha empezado a perder peso, pasando a representar en la actualidad un 16% del PIB, frente al 19% que suponía en el año 2000, lo que le sitúa lejos del objetivo del 20% en 2020 y "puede tener graves consecuencias para nuestras economías y el bienestar de los ciudadanos".

En un escenario que contó con la presencia del comisario de Acción por el Clima y Energía, Miguel Arias Cañete, parlamentarios europeos, embajadores y otros representantes de la Comisión Europea, el presidente de Repsol destacó el papel de la industria en el crecimiento económico de Europa y en su lucha contra el cambio climático, informó la compañía.

Así, alertó de ese riesgo de deslocalización de la producción industrial europea y recordó también que las empresas del continente se encuentran entre las más eficientes y comprometidas con la reducción de emisiones.

Además, aseguró que el liderazgo más efectivo de Europa "requerirá emplear nuestros recursos, inteligencia y ciencia en el desarrollo de tecnologías que puedan ayudar a Asia a reducir, capturar o compensar las emisiones".

Contribución de todos los sectores

Para ello, Brufau solicitó la contribución de todos los sectores -gobiernos, empresas públicas y privadas, actores sociales y ciudadanos- para cumplir con el Acuerdo de París, un compromiso asumido plenamente por Repsol que se traduce en un objetivo de reducir en un 40% la intensidad de CO2 por cada unidad de energía suministrada en 2040.

Según el último informe de Transition Pathway Initiative (TPI), una asociación con sede en Londres que reúne a 50 de los mayores inversores que gestionan una cartera de activos de más de 15 billones de dólares (unos 13,6 billones de euros), Repsol es una de las dos únicas empresas del sector del petróleo y gas, junto a Royal Dutch Shell, alineadas con la aspiración de alcanzar los objetivos marcados en la COP21 de París, principalmente limitar a dos grados centígrados el incremento de la temperatura media global del planeta respecto a los niveles preindustriales.

Importancia de la tecnología y la innovación en la transición energética

Asimismo, Brufau valoró la importancia de la tecnología y la innovación en la transición energética. "Es el momento de dejarnos guiar por los científicos y los expertos en tecnología, que están capacitados para abordar los retos con mayor profundidad", dijo.

Entre otras medidas, el presidente de Repsol recordó su propuesta de destinar el 20% de los impuestos procedentes del consumo de gasolina y diésel en Europa a programas de reforestación para conseguir así la neutralidad en términos de emisiones de la movilidad en 2050.