El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha participado esta mañana en un acto de UGT Aragón, donde ha avanzado a los medios de comunicación que se celebrarán movilizaciones permanentes para avanzar en la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y en la derogación de la reforma laboral y de pensiones.
El pasado jueves 11 de febrero se celebró la primera gran movilización de UGT y CCOO en todas las provincias españolas, con el objetivo de presionar al Gobierno a retomar las negociaciones sobre las reformas laborales y la subida del SMI, paralizadas en marzo de 2020 por la irrupción de la pandemia.
Así, el líder sindical ha pedido al Gobierno retomar las negociaciones en el punto en el que estaba en marzo, con acuerdo en ciertos temas con la patronal e incluso el Gobierno, según afirma Álvarez. Entre los aspectos de la derogación de la reforma laboral, el representante de UGT pide priorizar el convenio sectorial sobre el convenio de empresas, “como estaba antes de la reforma laboral”.
“La pandemia no ha parado que los convenios decaigan. No podemos esperar a derogar”, explica el secretario general, que ha hecho un llamamiento a los trabajadores para aumentar el número de movilizaciones, en la medida que la pandemia pueda permitirlo. “No podemos renunciar a la movilización. La combinación de negociación y movilización siempre da buenos resultados, gobierne quien gobierne”, asegura Álvarez.
Derogar la reforma de pensiones de 2013
La segunda gran petición del sindicato pasa por derogar la reforma de pensiones de 2013, con medidas clave como hacer desaparecer el factor de sostenibilidad, rechazar el aumento de los años de cálculo para la cotización y retomar la revalorización automática de las pensiones. “El sistema de pensiones no tiene un problema de gastos, tiene un problema de ingresos”, ha recalcado el líder sindical.
Pepe Álvarez también ha solicitado la mejora del salario mínimo y la mejora del escudo social. “Valoramos las políticas aprobadas para ayudar a la gente pero son claramente insuficientes” -asegura- “Hay centenares de personas que no tienen nada. El Ingreso Mínimo Vital no ha llegado ni siquiera a un tercio de las personas que lo han solicitado. Hay que dar solución a todos estos problemas”.
“No es un sistema caritativo, sino un sistema de derechos”, ha matizado el secretario general durante la rueda de prensa. Más allá del anuncio de nuevas movilizaciones, el representante de UGT ha valorado positivamente la aportación de los fondos europeos, por un valor de 74.000 millones de euros, y aboga por un cambio en el sistema productivo.
Entre otras medidas, ha mencionado unir el territorio para que las partes vaciadas puedan recuperar actividad, potenciar las energías limpias y la mejora del sector energético, logístico y telecomunicaciones. En esta línea, ha hecho un llamamiento al sector público para terminar con la precariedad laboral y controlar las licitaciones. “Hay que predicar con el ejemplo. Empiecen ustedes en su casa”, ha pedido al Gobierno.
