La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) revisaba hace apenas dos meses sus previsiones de crecimiento para la economía española, mejorando el dato y elevándolo al 2,3%. Sin embargo, este jueves el pesimismo se ha vuelto a instaurar en el organismo. Cristina Herrero, presidenta de la autoridad, ha apuntado hacia una desaceleración del crecimiento económico español durante la segunda parte del año que llegará “con mayor intensidad y anticipación” de lo esperado.
Además, la máxima dirigente de la AIReF ha pronosticado también una pérdida de dinamismo del mercado laboral. "Los indicadores y datos disponibles apuntan a una desaceleración del crecimiento económico para la segunda mitad del año que viene acompañado, además de cierta pérdida de dinamismo en lo que se refiere al mercado de trabajo", ha trasladado Herrero. Para la presidenta, los factores que propiciarán esta desaceleración ya se atisbaban antes de verano y el periodo estival no ha hecho más que confirmarlos, añadiéndose la subida del petróleo.
"La desaceleración económica que anticipábamos antes del verano ahora parece que se va a producir con mayor intensidad y con mayor anticipación", ha explicado la presidenta del organismo independiente. Entre los factores que afectan a la economía en esta segunda parte del año, Herrero ha señalado la persistencia de la inflación subyacente, el repunte en los precios del gas y del petróleo, el deterioro del comercio internacional y la traslación del endurecimiento de las condiciones monetarias a la economía real.
La subida de los tipos de interés acometida por el Banco Central Europeo (BCE), que ha elevado el precio del dinero a su valor más alto de la historia (4,5%), preocupa a la autoridad independiente. A esto, Herrero suma como riesgo la ratio de deuda de España, que se sitúa en el 110% del Producto Interior Bruto (PIB), pese a que se reduce a un ritmo más rápido del pronosticado y de que España alcanzará los objetivos de reducción un año antes de los pactado con Bruselas. España está "en una posición ciertamente vulnerable", asegura Herrero.
A pesar de este pesimismo, las previsiones de déficit de la AIReF para el año 2023 son del 4,1% y anticipan que podría alcanzarse el objetivo del 3% para el año próximo. Esto dependerá dos factores fundamentales, según Herrero. Uno de ellos es la retirada de las medidas que adoptó el Gobierno central y que están en vigor para responder a las consecuencias de la crisis energética y la crisis de precios, que suponen un impacto del 1,1% del PIB en 2023. El otro factor vinculado a lograr ese objetivo del 3% es que las administraciones territoriales moderen el crecimiento de su gasto.
Nuevas reglas fiscales
Sobre las nuevas reglas fiscales que la Unión Europea (UE) está debatiendo, Herrero ha pedido avanzar unidos. La presidente considera que el anterior marco que no tenía en cuenta las especificidades de cada país "se ha mostrado ineficaz" y cree que hay un "gran consenso" de reforma del marco fiscal europeo en este sentido. Una de las líderes de estas negociaciones es la representante española, Nadia Calviño, que está apostando en la línea defendida por la AIReF.
Herrero ha insistido en que se debe garantizar la credibilidad del marco fiscal europeo, ya que hasta ahora ha generado cierta "desafección". "Se debe conseguir que sean creíbles y para ello tienen que ser factibles", ha reiterado. "El nuevo marco de reglas fiscales europeo obliga a hacer una planificación a medio plazo y a hacer unos planes estratégicos que desde luego requerirá de consensos por parte de todas las administraciones públicas", ha enfatizado.
Incertidumbre por la investidura
La investidura falsa de Alberto Núñez Feijóo está dilatando los tiempos para la formación de un nuevo Gobierno, lo que no solo está haciendo perder el tiempo a los ciudadanos, sino que está generando incertidumbre económica. Herrero ha reconocido que hay "una gran incertidumbre" respecto a la formación del Gobierno de la nación y ha admitido "preocupación", ya que en 2024 España se enfrenta a que ya no habrá suspensión de reglas fiscales y, por lo tanto, si no está en vigor el nuevo marco de reglas estará en vigor el anterior.
Mientras, Alberto Núñez Feijóo continúa demorando un proceso que se sabe desde un inicio que no conseguirá su objetivo. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aguarda su momento con “muchas ganas de empezar ya esta Legislatura”. El momento de Feijóo llegará el próximo martes y, tras su fracaso, será el turno de Sánchez, que deberá aunar todas las fuerzas posibles para seguir durmiendo en la Moncloa el próximo año.
