Actor, cantante, director teatral, etcétera. El malagueño Fran Perea considera que la sociedad también se articula a través de la política. Su gira Viaja la palabra, con la que tocará el próximo 14 de mayo en el Teatro Lara de Madrid, incluye canciones con reflexiones íntimas de su camino a los 40 años, hacia la madurez. Adelantó unos temas este jueves a un reducido grupo de seguidores, con los que luego charló dentro de una experiencia cultural personalizada ymás. Minutos antes, hablamos con él de su implicación con la sociedad. Esquiva mojarse más de la cuenta en algunos aspectos porque “no puedes dar tu opinión sin que te machaquen”. Si bien, nos confiesa que no le gusta la ultraderecha.

 

Pregunta.- Acaba de dirigir ‘Mitad del mundo’, un texto de Pablo Díaz Morilla que cuenta un hipotético encuentro entre Christopher Reeve y Pinochet, donde el actor estadounidense intercede por la vida de un grupo de actores y actrices detenidos por la dictadura de Chile. ¿Qué se llevan los espectadores de dicha obra de teatro?

Respuesta.- No es una función que hable sólo de la dictadura de Pinochet. Habla sobre cómo el ser humano puede llegar a infringir tanto dolor a otro ser humano. Y de una paradoja muy peculiar: en este caso, Pinochet tuvo una amante que se llamaba Piedad y que era pianista. Piensas que cómo puede ser que un tipo así tuviera una amante que se llamara Piedad, una palabra que él nunca trabajó. El espectador va a hacer un recorrido por momentos terribles del ser humano, donde el mensaje que se mostró es que se pueden hacer todas esas atrocidades con la mayor impunidad.

P.- ¿Da la sensación de que a los dictadores les gusta rodearse de cultura?

R.- Pinochet prefería arrancarle la mano y la lengua a los creadores como Víctor Jara. O cortarle los párpados a la gente.

"El teatro tiene que estar ahí para ser un altavoz de lo que ocurre y para hablar de lo que pasa en la sociedad"

P.- Como actor, director y empresario teatral; toca mucho temáticas políticas. ¿Por algún motivo en especial?

R.- El teatro tiene que estar ahí para ser un altavoz de lo que ocurre y para hablar de lo que pasa en la sociedad. La sociedad también se articula a través de la política. Está muy bien que se hablen de esas cosas para que la gente, cuando vaya al teatro, pueda tener esos momentos de conciencia.

P.- ¿Cómo ve la sociedad ahora mismo?

R.- La veo cambiando a una velocidad de miedo, con movimientos muy interesantes que se han puesto en marcha de unos años para acá. Yo creo que despertamos hace unos años. Sobre todo, nuestra generación. Pasábamos un poco más, estábamos menos implicados en la actividad política. Y hace unos años se despertó. En ese sentido, hay un escenario bastante más plural. Esto que nos han vendido del Primer Mundo no es siempre todo lo bonito que nos decían. La realidad es que a las familias les cuesta llegar a fin de mes y que no vivimos tan bien como nos contaron.

“Esto que nos han vendido del Primer Mundo no es siempre todo lo bonito que nos decían”

P.-Con sus palabras, uno recuerda el movimiento 15-M. Surgió Podemos. ¿Cree que seguirá el efecto el domingo, día de elecciones generales?

R.- A mí me gusta que haya variedad. Salir del bipartidismo me parece algo bueno. Lo que pasa es que a ver hacia dónde vamos. Tampoco me gusta la ultraderecha.

P.- Este mismo jueves salió una información de cadena COPE que daba 70 diputados a VOX.

R.- Mire lo que ha ocurrido en Andalucía. No sabemos qué está pasando. Es muy curioso que, en un mundo en el que cada vez hay menos fronteras, que cada vez está todo más abierto, que hoy te ponen Netflix y puedes ver series de todas partes, vayamos otra vez hacia algo mucho más aislado y mucho más cerrado. Me da mucha pena, la verdad.

P.- ¿Mojarse políticamente, como cuando formó parte de la plataforma de artistas que apoyaron a Zapatero para las generales de 2008, le ha conllevado algún disgusto?

R.- Muchísimos. Por eso, ya no me implico políticamente. En mis redes sociales, no doy mis opiniones. No tengo ganas de que la gente me machaque. Como no puedes dar tu opinión sin que te machaquen, prefiero no hacerlo.

Fran Perea adelanta sus nuevos temas a un grupo de seguidores. Luis Marchal

P.- Eso sí, recientemente, se estrenó en las charlas TEDx en Málaga con una Ted Talk bajo el título La cultura es riqueza. ¿La cultura vive un buen momento en España?

R.- Vive un buen momento porque la gente demanda cultura. La cultura genera mucha riqueza, en muchos sentidos. En mi charla hablé precisamente de eso. De la riqueza espiritual, de la riqueza para el alma, de la riqueza para las ideas. Pero también de la riqueza económica. Es verdad que la gente va mucho al teatro, al cine, a conciertos, etcétera. Eso genera dinero para un país. Y es identidad cultural, ahora que estamos con las identidades. Lo único es que las instituciones no están a la altura, ni los políticos. Sólo hay que ver el tiempo que se ha dedicado a la cultura o a la educación en algunos de los debates. Es evidente que las instituciones no están a la altura de los creadores, ni de la demanda del público. Lo pienso firmemente.

“La cultural está reflejada en los programas electorales, pero no está en la mesa de debate”

P.- ¿Y la cultura en los programas electorales? ¿Está bien reflejada?

R.- Está reflejada, pero no está en la mesa de debate, que es lo preocupante.

P.- Tras ocho años de silencio en el terreno musical, ¿qué supone para Fran Perea la gira Viaja la palabra?

R.- Un proyecto con mucha ilusión. He estado ocho años sin sacar disco, seis años sin hacer gira. El 14 de mayo tocaré en Madrid, donde llevo siete años sin hacerlo.

Fran Perea, durante un evento cultural. Luis Marchal

P.- Será en el Teatro Lara. ¿Le cuesta salir del escenario de un teatro?

R.- Es verdad que mis conciertos son espectáculos que tienen mucho de teatral. Tienen la poética de las canciones. Además, llevo dos diseñadores trabajando en directo, una ilustradora y un diseñador gráfico, que van proyectando al mismo tiempo que las canciones. Van creando poesía visual. Uno va aplicando la experiencia que va teniendo a lo que hace. Es un disco más para teatro, más para escuchar. No es un disco para bailar. Es un disco que invita a la reflexión, a escuchar, es un viaje a la palabra y a la emoción que generan las palabras.

“Quizá soy Marca España. Me dedico además a hacer un programa de divulgación del español a través de la música”

P.- Este trabajo recibe influencias de cantautores nacionales y americanos de los 70, con un sonido muy personal, con raíces folk y mediterráneas. Como cantautor, ¿con qué se siente comprometido?

R.- Básicamente, he querido hacer un ejercicio de honestidad en el sentido de buscar dentro de mí las emociones que tengo y ponerlas en palabras, para que alguien pueda leer esas palabras y entender a lo mejor las emociones que también tiene dentro. Buscas que si alguien pueda encontrar una palabra que describa alguna emoción y le ocurre, para mí habrá sido un logro.

P.- En España, tiene conciertos ya confirmados a partir de septiembre en Barcelona, Valencia, Zaragoza, Bilbao, Salamanca, Valladolid, Murcia. ¿Irán millennials a ellos?

R.- Espero que sí. Es verdad que he llegado a generaciones anteriores, pero las series que he hecho se siguen emitiendo. Hay gente que se puede enganchar de las nuevas generaciones a la música que estoy haciendo.

P.- Le sorprendió el éxito internacional que tiene en Finlandia. Por otro lado, el 23 y 25 de mayo, estará en Serbia con sendos conciertos en Novi Sad y Belgrado. ¿Se considera Marca España?

R.- Quizá, porque soy un tío de aquí, de España. Y me dedico además a hacer un programa de divulgación del español a través de la música. En Serbia concretamente estamos trabajando con el Instituto Cervantes y con Acción Cultural Española para llevar el español fuera de nuestras fronteras. O sea, que sí entiendo que soy Marca España.