El secretario general del Partido Socialista de Jaén, Francisco Reyes, mostraba este martes sus condolencias tras conocer el fallecimiento de Leocadio Marín. “Trasladamos desde el PSOE de la provincia de Jaén el pésame a la familia de Leocadio, a la Agrupación del PSOE de Baeza, y al socialismo andaluz y español”.

Reyes destaca que “hablar de Leocadio Marín es hablar de una gran persona, es hablar de compromiso, de una persona trabajadora” que “ha tenido una carrera política brillante, que ha representado perfectamente al socialismo jiennense”. En este sentido, recuerda que Leocadio Marín tuvo responsabilidades como presidente de la Diputación de Jaén, presidente de la Cruz Roja, consejero de Agricultura de la Junta de Andalucía, delegado del Gobierno y alcalde de Baeza.

Fallecimiento

Era este martes bien entrada la tarde cuando la noticia se conocía y llenaba de tristeza a quienes le conocían. Marín fallecía con 81 años y con una trayectoria a sus espaldas en las que fue casi todo en política de la mano de su partido. Político vocacional y con un gran sentido del servicio público, además de licenciado en Filosofía y Letras por la Universidad de Granada, estuvo donde le pidieron porque su mentalidad además era disciplinada. Fue motivo de foco y protagonismo político cuando, en realidad, Leocadio Marín, jamás lo buscó y huía de los oropeles de la función pública.

Su pasión por la política y su eficacia como hombre de partido le llevaron a estar en puestos tan relevantes como la presidencia nacional de la Cruz Roja Española de finales de 1985 hasta 1990, puesto que asumió con ilusión dejando la relevante Delegación de Gobierno en Andalucía

No obstante, Marín empezó desde lo provincial, siendo elegido presidente de la Diputación Provincial de Jaén en las primeras corporaciones municipales y provinciales democráticas. Posteriormente fue elegido diputado autonómico y de ahí Delegado del Gobierno de Andalucía. 

En un momento convulso del socialismo andaluz, fue enviado de apafuegos conciliador para lo que fue elegido presidente del PSOE-A en 1988. Permaneció en esa importante sede de la sevillana calle San Vicente como cargo orgánico de la poderosa federación del PSOE, la más numerosa en cuanto a militantes y agrupaciones, hasta 1994. De 1990 a 1993 fue consejero de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía.

Amor por Baeza

Pero la máxima felicidad política a la que aspiraba Leocadio Marín, le vino en 2007, cuando logró ser alcalde de su pueblo, Baeza, su gran aspiración. La prueba del cariño que se le profesaba es que consiguió el bastón de la alcaldía baezana al frente de su partido, arrasando con una mayoría absoluta de un 52% de los votos y 9 concejales de 17 que componían la Corporación. Estuvo como regidor hasta 2015, año en el que la releva en el cargo su sobrina Lola Marín Torres. En las últimas elecciones municipales, habiendo empatado en número de concejales con el PP (8 a 8), una decisión inexplicable, el del voto decisivo de la formación Baeza Merece Más, arrebata la alcaldía a la sobrina de Leocadio Marín para llevar a la alcaldía a la derecha representada por el alcalde actual del Partido Popular.