Emiliano García-Page, de celebrarse las elecciones autonómicas y municipales a fecha de hoy, volvería a ganar en las urnas y con una mayoría absoluta aún mayor de la que obtuvo el 28 de mayo, con dos escaños más.

Así lo ha desvelado el último ElectoPanel Autonómico de Electomanía, publicado este martes 26 de diciembre y realizado a través de un cuestionario que ha tomado 1.340 muestras. El PSOE castellanomanchego ampliaría su mayoría absoluta de los 17 escaños a los 19, reforzando así su presencia en las Cortes regionales siete meses después de los comicios.

Por su parte, el Partido Popular de Paco Núñez subiría un diputado más, llegando a los 13 escaños. La peor baza se la llevaría Vox, que perdería tres de sus cuatro diputados, es decir, tan sólo quedaría un representante del partido de extrema derecha en las Cortes castellanomanchegas.

En estos términos, el PSOE conseguiría un 47,6%; el PP, un 34,2% de los votos en las urnas; Vox, como tercera fuerza, con un 11,1%; Sumar, por su parte, un 3,2% de las papeletas a su favor. En menor medida, se sitúan Ciudadanos con un 1% y Podemos con un 0,7%.

Page, el socialista que mantuvo la mayoría absoluta el 28M

Cabe retroceder a finales del pasado mes de mayo, a la noche electoral, cuando buena parte del mapa nacional se tiñó de azul con las sendas victorias de los populares en comunidades autónomas como Extremadura, Comunidad Valenciana o Aragón, entre otras. No obstante, de todas aquellas en las que se mantuvo el PSOE, la fuerza más férrea vino de la mano de García-Page, el único barón socialista que logró mantener su posición sin grandes variaciones en las votaciones.

Fue así como García-Page obtuvo 17 escaños con más del 45% de los votos, pese a que durante el escrutinio, cerca de la recta final, por breves instantes el popular Paco Núñez le sobrepasó en un escaño, aunque a la hora de la verdad, la balanza se equilibró a favor del PSOE. La segunda fuerza más votada, en consecuencia, fue el PP con 12 escaños y un 33% de intención de voto, siendo el tercer y último puesto para Vox con cuatro diputados. Otra de las conclusiones que reflejaron las urnas entonces fue la culminación de la fuerza política de Ciudadanos en Castilla – La Mancha, formación que no obtuvo ningún representante en las Cortes.

Desde entonces, García-Page ha mantenido su indiscutible liderazgo en su región con promesas de calado. Por un lado, la reforma del Estatuto para cambiar la ley electoral y, por ende, poder aumentar la representatividad parlamentaria, dándole un giro sustancial a la normativa que impulsó en su momento la popular María Dolores de Cospedal. Por otro lado, el presidente socialista también anunció la puesta en marcha de una ley de igualdad salarial entre hombres y mujeres para 2025: "Nos vamos a convertir seguramente en la primera región que tiene en vigor una ley para abordar esta materia", ensalzó en su momento.

Con la vista fijada más allá de las fronteras autonómicas, en el plano nacional, en varias ocasiones, ha continuado esgrimiendo una línea crítica con algunas de las medidas adoptadas por el Gobierno central de Pedro Sánchez, mostrándose así como uno de los barones más críticos con la ley de amnistía y los pactos de legislatura con los partidos independentistas catalanes -vaticinando una legislatura corta y un fortalecimiento tanto como del independentismo como de Vox durante estos años, tal y como dejó caer en su reciente entrevista con Jordi Évole-. No obstante, en la carrera de Sánchez a la investidura, no dudó en tender puentes con la causa socialista.