La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha aprovechado en las últimas horas la inauguración de la línea de AVE Madrid-Asturias para cargar contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. En una jornada marcada por los ataques al líder del Ejecutivo por el agua y el conflicto en Oriente Próximo, la responsable de Sol sumó un frente más a última hora de la noche.

El próximo miércoles se inaugura la línea de la capital hasta la comunidad del norte y la presidenta madrileña se queja de que su homólogo a nivel nacional no ha contado con ella. En las últimas horas, la líder regional afeaba al Jefe del Ejecutivo en una entrevista concedida a 13TV que este “está en rebeldía con quien no le baila el agua”: “Es la primera vez que ocurre en la historia del AVE. Aunque algo así es verdad que no es nuevo por parte de Pedro Sánchez… no nos invitó a la cumbre de la OTAN, a la cumbre del clima que se desarrollaban en Madrid y en instalaciones gestionadas en un porcentaje altísimo por Madrid, no por ellos”.

Siguiendo esta senda, subrayaba que es algo que ha pasado más a menudo, como “cuando visitan ayuntamientos de la Comunidad o instalaciones públicas aprovechando que tenemos plenos en la Asamblea o que estamos en el Consejo de Gobierno”. “Lo han hecho, por ejemplo, cuando se presentó un centro donde se unía y distribuía el trabajo que después se prestaba a los ciudadanos desde Ucrania cuando la inmensa mayoría de las competencias eran propias”.

La presidenta madrileña sostiene que esto “es parte” del “estilo” de Sánchez, a quien considera “una persona que está en rebeldía con las comunidades autónomas, con aquel que no le baile el agua, con los organismos que le marcan los límites, con la Unión Europea, con todos”. La líder regional asumía, dejando a un lado su particular cruzada con Sánchez, que “hay que tener cintura” porque “todos recibimos críticas en política y es verdad que nos criticamos mucho, pero al final te tienes que entender, representas a todos los ciudadanos”.

“No sé qué tipo de agravios quieren crear entre regiones, pero yo solo sé que esto es una buena noticia que une regiones como Asturias y Madrid, regiones hermanas. Y estamos aquí para estar al servicio de los españoles desde las propias autonomías y peleando por nuestros ciudadanos para darles oportunidades y prosperidad”, apostilla.

El tramo para inaugurar “no está situado en la Comunidad de Madrid”

Desde Moncloa responden a Ayuso. Fuentes del Ministerio de Transporte consultadas por ElPlural.com aseguran que el criterio aplicado es “el de siempre”, ya que a la cita acudirán los responsables autonómicos de los territorios que comprenden el tramo: Alfonso Fernández Mañueco (Castilla y León) y Adrián Barbón (Asturias). “Como siempre, se ha invitado a los presidentes de las Comunidades Autónomas del tramo que se pone en marcha”, exponen.

En este caso concreto explican que el tramo que se inaugura es el que queda comprendido entre León y Asturias, de 50km; y ponen otros ejemplos donde el procedimiento a seguir ha sido el mismo: “En las últimas puestas en servicio (Ourense, Extremadura, Burgos o Murcia) tampoco estuvo la Comunidad de Madrid porque los tramos a inaugurar, en esos casos, tampoco estaban situados aquí. Lo mismo sucedió en la puesta en servicio de Murcia, cuando no asistió el presidente de Castilla-La Mancha por no pertenecer al tramo inaugurado en esta comunidad autónoma”.

Madrid veta a miembros del Gobierno en sus actos

La decisión de Madrid a la tomada por el Gobierno Central ha sido la del ojo por ojo. En otras palabras, la Comunidad vetará de sus actos a miembros del Ejecutivo de coalición para devolver un comportamiento que consideran inaceptable por parte del Gobierno. Lo harán, dice, “golpe a golpe”, aludiendo a la expresión empleada por la líder regional en las últimas semanas.

Y es que a Sol no le parece suficiente la explicación que esgrime Moncloa y se remonta a las inauguraciones del AVE a Zaragoza, Valencia, Valladolid y Albacete, cuando los expresidentes de la Comunidad Esperanza Aguirre y Alberto Ruiz Gallardón no viajaron en el tren, pero lo despidieron desde la estación.

No es el primer choque de estas característica que se da entre el Gobierno Central y el equipo de Ayuso. Así las cosas, todavía quedan en la retina de muchos los actos del pasado Dos de Mayo, cuando el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, quedó relegado de la tribuna de autoridades en los actos. El hecho causó una gran polémica y fue muy criticado desde el equipo de Sánchez, mientras que desde el de la presidenta se percibió como poco menos que amable, habida cuenta de que barajaron incluso la opción de no invitarle.