Isabel Díaz Ayuso, recién reelegida presidenta de la Comunidad de Madrid, cerrará finalmente la línea 1 de Metro este sábado 24 de junio. Una decisión que dejará sin transporte público a más de 350.000 vallecanos durante todo el verano, previsiblemente hasta finales de septiembre, y ante la que Renfe, como responsable del servicio de Cercanías, ha tenido que tomar cartas en el asunto para no aislar a los habitantes de la Comunidad de Madrid. Renfe ha anunciado el refuerzo de sus servicios de Cercanías a partir de este sábado, con casi 14.000 plazas sentadas, con el objetivo de hacer frente al desastre de Ayuso con la línea 1.
Renfe, como responsable público del servicio de Cercanías y dependiente del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana del Gobierno central, mantendrá todos los servicios de Cercanías que presta, a día de hoy, durante todo el verano. Un refuerzo de sus servicios frente a lo que ocurre otros veranos, cuando la frecuencia de los trenes de Cercanías que unen el centro de Madrid con los distritos de la periferia disminuye en julio y agosto por la menor demanda. Ahora Renfe mantendrá tal y como están las líneas C3 y C4 de Cercanías Madrid para conectar Atocha con el norte de Madrid durante todo el verano ante los cortes en la línea 1 de Metro de Ayuso.
El operador público de transportes aumentará los servicios de Cercanías con 25 trenes más, frente a la frecuencia de veranos anteriores, en las líneas C3 y C4, con trayectos hacia el norte como San Sebastián de los Reyes o Alcobendas desde el centro de Madrid. Un refuerzo que supone ofrecer a los madrileños 13.850 plazas sentadas en los trenes que a diario unen el sur con el norte de Madrid, un 6,2% más frente a veranos anteriores.
Ayuso pide ayuda a Renfe in extremis
Renfe ha tomado la decisión de no reducir la oferta de sus trenes de Cercanías en verano in extremis. Y es que in extremis ha sido la petición de ayuda de Ayuso a Renfe -o al Ministerio de Transportes de Raquel Sánchez en última instancia-, formalizada este lunes 19 de junio en la última y única reunión del Consorcio de Transportes de Madrid.
Ayuso ha recurrido a la ayuda a Renfe para no dejar sin transporte público a los madrileños apenas cinco días antes de cortarles la línea 1 de Metro. Y lo ha hecho en la única reunión celebrada en el Consorcio de Transportes de Madrid a pesar del caos del cierre del Metro en Vallecas. El Consorcio de Transportes ha pedido el refuerzo de los trenes de Cercanías a Renfe este mismo lunes, sin apenas margen de actuación ante el inminente corte de la línea 1 de Metro a partir de este sábado.
Una falta de previsión que denuncian desde Renfe y que difiere de la gestión de la compañía, y de Adif, en el caso del corte del túnel que une Sol y Nuevos Ministerios por las obras de mejoras en la estación de Chamartín, anunciado al Consorcio de Transportes de Madrid cuatro meses antes de empezar las obras, el pasado 4 de febrero, con la suficiente previsión para no comprometer el transporte público de los madrileños.
A pesar de estar inmersos y centrar los esfuerzos en las obras de Chamartín y en los dos túneles en construcción, Adif y Renfe, como representantes públicos de transporte, ofrecen ahora su ayuda al Consorcio de Transportes de Madrid para no aislar a los madrileños. No obstante, advierten de que la coincidencia en el tiempo de ambas obras en el transporte público de la comunidad puede complicar los trayectos de madrileños y visitantes a lo largo del verano.
Impacto en el turismo: sin conexión directa Atocha-Sol durante todo el verano
Renfe no solo ha anunciado el refuerzo de sus trenes de Cercanías para aliviar el caos de Ayuso con el transporte público de Madrid. La compañía deja también la puerta abierta a aumentar el personal disponible en las estaciones de transbordo durante el tiempo que duren las obras, en principio tres meses hasta finales de septiembre. El refuerzo de personal de Renfe se centraría en estaciones en las que se prevén situaciones de caos por la poca previsión de los cortes en la línea 1 de Metro, una de las más utilizadas por los madrileños y turistas que visitan la capital en verano.
Y es que el corte de la línea 1 entre las paradas de Valdecarros y Sol no solo afectará a los más de 350.000 vecinos de Vallecas, sino que mantendrá inutilizadas paradas clave para el turismo como Atocha, Estación del Arte o Tirso de Molina. De hecho, el trayecto Sol-Atocha, uno de los más utilizados por los visitantes de la capital, permanecerá cerrado durante todo el verano, sin una conexión directa entre el centro de Madrid -no hay ni una sola guía turística de Madrid en la que no aparezca la Puerta del Sol- con la principal estación de tren de la ciudad.
El objetivo último de Renfe es facilitar la movilidad de los usuarios de transporte público afectados por el cierre de las paradas de la línea 1 de Metro por decisión del Gobierno de Ayuso, ahora con mayoría absoluta en la Comunidad de Madrid. Renfe pone a diario en marcha más de 1.400 trenes de Cercanías en la Comunidad de Madrid, con una media de 700.000 viajeros en sus trenes.
