"Siempre hemos sido generosos, pero todo tiene un límite". De esta forma ha justificado Rocío Monasterio, portavoz de Vox en la Asamblea de Madrid, su negativa a apoyar los Presupuestos presentados por la Comunidad de Madrid para el año 2023, una postura que pone de manifiesto no solo el nuevo cambio de marchas de la formación de extrema derecha sino la soledad de Isabel Díaz Ayuso en la Cámara regional en este asunto. Y es que la lideresa no ha encontrado ni siquiera en su principal socio en las instituciones madrileñas el soporte necesario para sacar adelante las cuentas públicas que ha puesto encima de la mesa.

Ayuso, sola con sus Presupuestos

Así ha quedado reflejado este jueves tanto antes como durante el debate de las enmiendas a la totalidad propuestas por Más Madrid, PSOE y Unidas Podemos al texto del Ejecutivo madrileño. La cita, que se ha producido inmediatamente después de la sesión de control al Gobierno madrileño, ha congregado a los portavoces de los grupos parlamentarios que han presentado las reformas así como al consejero de Economía, Javier Fernández-Lasquetty, quien ha sido el encargado de rebatir las propuestas de las formaciones. También a Monasterio, que durante el pleno ha vuelto a rebajar el tono con la dirigente regional.

De hecho, ha agradecido a Ayuso "sus palabras de apoyo" a su partido tras la expulsión de la diputada de Vox del Congreso después de calificar como "filoetarras" a Bildu. No ha estado durante la mesa redonda, sin embargo, una Ayuso que ha vuelto a ser cercada por sus políticas en sanidad y quien se ha quedado sola en la batalla de los presupuestos. A pesar de las "tendidas de mano" que ha lanzado en las últimas sesiones Monasterio, la lideresa no ha encontrado un hombro para apoyar las cuentas públicas en la portavoz de extrema derecha.

"A día de hoy no podemos apoyar estos presupuestos", ha asegurado la dirigente ultra en declaraciones a los medios tras el pleno y ha avisado. "Siempre hemos sido generosos, pero todo tiene un límite. Lo mínimo después de apoyar durante todo este tiempo 20 leyes es intentar tratar bien al socio, respetar a sus votantes y no humillarles", ha dicho antes de insistir en que en el texto "no hay ninguna intención de cambiar nada ni en materia social, educativa o sanitaria" e incluso "se da la espalda a la realidad de los madrileños".

Monasterio ha denunciado que durante las negociaciones que hasta ahora ha mantenido su grupo con el Partido Popular se han hecho propuestas que "no son aceptables" y son una "humillación" para sus votantes, por lo que han avanzado que van a presentar 86 enmiendas al plan autonómico este viernes, día en el que finaliza el plazo oficial para ello. Sin embargo, la dirigente ultra no ha roto todos los puentes con Ayuso y ha avanzado que Vox va a votar en contra de las rectificaciones presentadas por las tres formaciones de izquierdas. "Queremos evitar que la izquierda llegue a gobernar", ha afirmado durante su tiempo de intervención.

"Es una humillación"

Entre las propuestas planteadas por este partido en las reuniones con el Ejecutivo regional -y que previsiblemente constituirán las bases del texto alternativo- se incluyen la reducción del IRPF en todos los tramos, la derogación de la Ley Trans o la eliminación de las subvenciones a los ayuntamientos que estén destinadas a cortar el tráfico en el centro de las localidades. "La respuesta del Gobierno ha sido no incluir ninguna de las enmiendas", ha criticado la portavoz, quien ha instado al Gobierno a que "destierre" las políticas de la izquierda de la región y que "sea valiente".

"No seremos un obstáculo pero no podemos poner nuestra firma en un Presupuesto que humilla a nuestros votantes", ha insistido antes de explicar que sus cambios están destinados a "proteger a los madrileños, los problemas de inseguridad, los salarios de los médicos, ayudas a los autónomos o dar la batalla cultural". "Mañana tendremos que registrar nuestras enmiendas para que los madrileños vean qué es lo que defiende Vox", ha afirmado Monasterio al respecto.

Lasquetty, por su parte, ha asegurado que el acuerdo con Vox para aprobar las cuentas están lejos aunque no ha dado un portazo a esta posbilidad. "Desgraciadamente, las posturas no están todavía cercanas. Esperamos seguir negociando, les pido que sigan negociando, porque son unos buenos Presupuestos para un Madrid que está creciendo", ha asegurado durante su intervención en el pleno al respecto del guante lanzado por la ultra derecha.

Si nada cambia y finalmente Vox vota en contra de las enmiendas de Unidas Podemos, Más Madrid y PSOE -que están centradas en aumentar la dotación presupuestaria a la sanidad, la educación o en el ámbito social-, el proyecto presupuestario de la Comunidad de Madrid seguirá los cauces para su tramitación. Con todo, todavía habrá que esperar a la tarde de este jueves para conocer el resultado de la votación.