La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, sí reconoce la violencia machista, aunque evita mojarse en exceso cuando le preguntan por los pactos que su partido ha llevado a cabo con Vox en algunas comunidades y ayuntamientos en las que el término ha sido sustituido por el de violencia intrafamiliar.

Por el asunto que junto a otros de carácter social como los derechos LGTBI se han convertido en protagonistas de los principales pactos entre la derecha y la extrema derecha ha sido preguntada este lunes la líder regional. Frente a las disputas que están ocurriendo a partir de una lacra tan presente y tan necesaria de combatir -también de llamar por su nombre-, la responsable de Sol ha lamentado que “tradicionalmente, cada vez que hay que hacer un pacto PP-Vox, por ejemplo en este caso, hablar de lo mismo una y otra vez, y luego que nadie se ocupe de verdad de la violencia contra las mujeres”.

En la misma línea, La presidenta de la región ha cargado contra la izquierda por culpar al PP de los acuerdos alcanzados con la ultraderecha. “No creo que haya que utilizar siempre este tema, como los de siempre”, ha emplazado. “Son los mismos asuntos que se utilizan de manera política y reiterada para intentar desprestigiar pactos. Me parece algo insensato”, ha añadido.

Ayuso ha subrayado que mientras se habla de esto nadie está atendiendo al aumento de denuncias por violencia machista o a las denuncias judiciales, de manera que “o entras por el hueco y el marco mental que te pone la izquierda, o ya no eres una buena mujer, o no sabes lo que quieres para ti”. “Parece que las mujeres que no pensamos como las mujeres de la izquierda somos tontas”, ha llegado a decir. “(Pero) cada mujer sabe exactamente lo que quiere”.

La presidenta de la región madrileña ha mantenido que su equipo “siempre ha trabajado para erradicar la violencia, también la que se ejerce contra la mujer”, pero a su juicio las fuerzas progresistas “siempre utilizan este tema”. “La lucha contra la violencia es de todos, como otras muchas cosas, pero en España están pasando cosas gravísimas y parece que no interesan porque no suscitan el mismo morbo mediático”, ha sostenido refiriéndose a los accidentes de tráfico o los suicidios.

De hecho, se ha llegado a referir a “otros problemas” que “nadie atiende”. “¿Cuántas familias tienen otro tipo de problemas y nadie las atiende? En un país donde no están naciendo niños, donde la España vaciada no deja de crecer, donde se ha abandonado al campo, a las empresas, a os autónomos. Para Ayuso “como ahí hace falta profundidad en los debates, no parece que tenga el mismo rédito” y, por eso “hablamos siempre de los mismos asuntos”.

“Los mismos asuntos” en Extremadura, Valencia, Aragón...

En consonancia con el discurso defendido por Ayuso se pronuncia ahora por ejemplo la candidata del PP en Extremadura, María Guardiola -de hecho, las palabras de la presidenta madrileña actúan de presión hacia su homóloga extremeña- quien ha pasado del “con Vox, no” a que es “imprescindible” el diálogo con la formación de extrema derecha. “Estoy segura de que pronto iniciaremos la marcha como gobierno para cambiar nuestra tierra”, ha destacado.

“No vamos a fallarles (…) Soy muy consciente de que también es imprescindible el respeto, el diálogo y el acuerdo pragmático con la formación de Vox en Extremadura. Compartimos una prioridad, pasar página a las políticas socialistas”, ha asumido después de suspender la Junta Directiva Autonómica que tenía prevista para este martes, evitando con ello que salgan de aquí voces críticas como la que ella misma había alzado unas semanas antes.

En Valencia, por su parte, la persona que se postulaba para ocupar la vicepresidencia y que finalmente será número uno de Valencia para el Congreso de los Diputados, Carlos Flores, fue condenado por ejercer violencia psíquica contra su exmujer. Mientras tanto, José María Llanos, conseller de Justicia, defiende a ultranza que “la violencia de género no existe, la violencia machista no existe”.

La situación no cambia en Baleares, donde el presidente del Parlament balear, Gabriel Le Senne, ha hecho gala no solo de su posición en contra de la existencia de la violencia machista, sino también contra el cambio climático, el racismo, la homofobia o la xenofobia en comentarios con los que ha inundado las redes sociales. Tampoco en Aragón, donde la presidenta de las Cortes aseguraba que Irene Montero “solo sabe de arrodillarse”, haciendo con ello alusión a que fue su relación con Pablo Iglesias lo que la ha aupado hasta el puesto que ostenta ahora.