Paz y Bien es el nombre de la última residencia que, probablemente, tenga que intervenir la Xunta de Galicia. Se encuentra en el municipio pontevedrés de Tui y tiene el dudoso honor de ser, ahora mismo, el segundo centro de estas características con más positivos, tras lo registrado hace algunas semanas en otras instalaciones de Vimianzo.

Según los datos facilitados por la Federación Gallega de Asociaciones de Familiares de Usuarios de Residencias y de la Dependencia, REDE, a través de su presidente, Paulino Campos, “tres de cada cuatro residentes están contagiados”. Esto se traduce en 51 de los 72 que ahora mismo están en el centro, es decir, el 71%. A ellos hay que sumar a “más de 20 cuidadoras”, entre trabajadoras y monjas, puesto que la Residencia Paz y Bien está gobernada por franciscanas.

Campos reveló hoy que en REDE “estamos muy preocupados” por lo que se está produciendo en este centro que describió como de “descontrol”.

Del mismo modo, también aseguró que esa situación se debe, sobre todo, a que a causa de las bajas debido a los contagios, “no hay personal suficiente”.

Ante esta situación, desde la Federación han planteado dos medidas de carácter urgente. Por una parte, “la intervención pública” de Paz y Bien. Esto, según confirmó Paulino Campos, podría poducirse en las próximas horas puesto que la Xunta ha enviado esta mañana un equipo para evaluar la situación. Lo extraño, a tenor de lo hecho por la administración autonómica en otros centros, sería que no la interviniese.

Por otro lado, Campos abogó por el “traslado de algunas de las personas infectadas” a la 'residencia integrada' de Bodía. Este centro se encuentra ubicado en la ciudad de Vigo y ahora mismo se destina a positivos. Esta decisión permitiría “aliviar la carga asistencial” en las instalaciones de Tui.

Segunda en contagios

La Residencia Paz y Bien es la segunda de Galicia con mayor número de contagios, únicamente superada por el centro de Vimianzo que llegó a acumular más de 80 casos positivos.

La gestión religiosa ha llevado a REDE a volver a criticar este tipo de modelo. En palabras de su presidente, el caso de Tui, que se ha repetido en otras ocasiones en Galicia, pone en entredicho la opción de la “beneficencia, en este caso religiosa”. A su juicio, “no puede ni debe formar parte del nuevo modelo de residencias que tendrá que salir de la hecatombe que viven los geriátricos”. Con contundencia dejó clara la postura de la Federación que tiene que pasar por la “profesionalización máxima de los cuidados a las personas mayores”.

En este último caso, detrás del origen de los contagios podría encontrarse alguna celebración religiosa en la habrían participado residentes y monjas de la orden de las Hermanas Franciscanas de la Inmaculada Concepción. Se da la circunstancia de que este centro, a diferencia de lo ocurrido ahora, en la primera ola de la pandemia logró no registrar contagio alguno.

Desde el inicio de esta crisis sanitaria, tal y como detalló hoy a ELPLURAL.COM el presidente de REDE han fallecido en residencias gallegas 586 mayores, 274 en la primera fase y 312 en esta segunda (desde el 19 de agosto). Esta cifra significa el 40,4% del total de pérdidas humanas a causa del COVID-19, 1.450 muertes con las últimas cifras conocidas este lunes.

La gestión de la Xunta de Galicia del coronavirus en relación con las residencias es uno de los quebraderos de cabeza del presidente, Alberto Núñez Feijóo. Los familiares de usuarios han criticado en más de una ocasión al máximo dirigente gallego al que han acusado de no hacerlo de manera adecuada. La controversia vivió su momento más álgido cuando su formación, el Partido Popular, se sirvió de su mayoría absoluta en el Parlamento para impedir la creación de una comisión de investigación que dilucidara lo ocurrido en las residencias de mayores de la región.