En los últimos días confirmaron desde el Bloque Nacionalista Galego que elevarían al pleno del Parlamento autonómico lo que desde diferentes sectores políticos, sociales y ecológicos se califica ya como el “escándalo” de los parques eólicos. Hoy lo han cumplido y elevando la petición para crear una comisión de investigación sobre “la política eólica del Gobierno del PP en los últimos 12 años”. El argumento para justificar esta solicitud es más que evidente: las decisiones judiciales que han echado por tierra varios proyectos.

El asunto es muy grave porque afecta de lleno a los años en los que Alberto Núñez Feijóo estaba al frente de la Xunta de Galicia, lo que de ir a más podría poner en entredicho el liderazgo nacional del de Os Peares.

Este martes, la mayoría absoluta de la que goza el PP ha impedido la creación de un órgano que investigue qué ha ocurrido en el mencionado período de tiempo en esta materia.

En el plenario se han visto momentos de tensión ante la petición de los nacionalistas de “saber la verdad” sobre el “escándalo” eólico.

Las acusaciones del BNG, en palabras de su diputado Luís Bará, han sido contundentes hablando de “ocultación” por parte del Partido Popular.

“Luz y taquígrafos”, reclamó el parlamentario del Bloque, quien explicó que la solicitud de su formación se debe a la poca transparencia de la Xunta a la hora de facilitar detalles de estas políticas y proyectos, lo que resumió en “sucesiones de vetos y boicots” para da la información correspondientes y reclamada.

Bará y su grupo ha venido centrando su queja sobre el concurso eólico de 2010, en el primer año de Feijóo al frente del Ejecutivo regional, un concurso que definió como “el mayor fiasco industrial de la historia de Galicia”.

“¿Qué tienen que ocultar?”, inquirió el diputado nacionalista, aludiendo al Grupo Popular y al Gobierno de Alfonso Rueda para preguntar “por qué se niegan a dar la documentación a este Parlamento” sobre lo que llamó el “expediente X” relativo al citado concurso de hace 13 años, para espetar “¿a quién protegen?”.

La empresa de la ex conselleira 

Además, Luís Bará mencionó otros episodios relacionados con las eólicas que consideró “muy escandalosos”. En concreto, habló del “perdón” de 11,7 millones de euros a la compañía Greenalia respecto a las monetarizaciones de los parques eólicos de Campelo y Lamas de Feás, ya que dejaron cambiar el plan industrial de 2010 "con efecto retroactivo".

Para el diputado nacionalista se trata de “un auténtico cambalache". Sobre este asunto recordó que ahora mismo está en la Fiscalía bajo una denuncia de malversación, algo que a su juicio es solo “la punta del iceberg”.

Cabe recordar que la conexión del PP gallego con Greenalia es evidente a través de la que fuera conselleira, diputada e, incluso, candidata 'popular' a la alcaldía de A Coruña en las últimas elecciones municipales, Beatriz Mato, siempre con Alberto Núñez Feijóo como líder del partido a nivel regional antes de dar el salto a Madrid y de la Xunta.

Pero no es la única referencia a casos específicos. El BNG también citó el perdón de 1.175 millones a Fenosa Wind e, incluso, habló de la tramitación de dos parques llamados Campos das Rosas y Porto Vidros, conocidos a nivel nacional estos días al ser mencionados por el cineasta y director de As Bestas, Rodrigo Sorogoyen, en la última ceremonia de entrega de los premios Goya.

La petición de comisión de investigación realizada por los nacionalistas recibió el respaldo del PSdeG. Su diputada, Begoña Rodríguez, reclamó que se aclaren las “posibles irregularidades".

Al hilo de lo dicho por Bará, también recriminó que falta de respuesta de la Xunta a los requerimientos en este sentido por parte de la oposición, que además “incumple” de manera “reiterada” los plazos establecidos por el reglamento del Parlamento.

"Negacionismo exacerbado climático"

Curiosa ha sido la respuesta de Marta Novoa. La portavoz 'popular', para justificar la negativa de su grupo a la comisión de investigación, aseguró que la misma no es otra cosa que un "capítulo más de negacionismo exacerbado climático", al tiempo que acusó a los nacionalistas de "demonizar al sector eólico", aludiendo incluso a luchas internas en el seno del BNG para atacar a su líder, Ana Pontón.

De igual modo, tras decir que la oposición va “en contra del progreso” con el único objetivo de “arañar unos pocos votos”, con esta comisión solo persigue “desgastar al adversario”.

A continuación, lo que no pudo evitar la parlamentaria del PP es referirse a la investigación abierta por la Fiscalía pro presunta malversación. En este caso, se limitó a decir que se trasladará el informe requerido con toda la documentación.