Tal vez como respuesta a lo dicho por el portavoz socialista en el Parlamento de Galicia, Gonzalo Caballero, acusando al BNG de posicionarse con el PP a la hora de no apoyar los presupuestos generales del Estado, hoy los nacionalistas gallegos han hecho público un comunicado en el que, para empezar, se muestran dispuestos a negociar con el Gobierno central las cuentas previstas para el próximo ejercicio 2021. Este sería el punto de partida al respaldo; el siguiente es el precio que han puesto al mismo: una inversión de 1.000 millones de euros “como mínimo”.

Ana Pontón, líder del Bloque, explicó que “cuando se alega que son cuentas expansivas y sociales”, en referecia a lo dicho por Caballero, como crítica a los nacionalistas, “son igual de expansivos y sociales que en Cataluña o en Valencia, por poner un ejemplo, y en esos territorios la inversión sube un 48 y un 45%, respectivamente”.

Ante este dato, la portavoz nacionalista se preguntó “¿por qué no ese mismo trato para Galicia?”, a lo que añadió que “no podemos aceptar un nuevo recortazo como si aquí no hubiese necesidades que atender, máxime en un contexto de crisis económica y social que tiene a muchas persona y sectores contra las cuerdas”.

Por su parte, el diputado del Bloque, Nestor Rego, señaló con respecto a las enmiendas parciales presentadas a los presupuestos que, además de reiterar la “total disposición” a negociar, su formación no está dispuesta a “colaborar” con unos presupuestos que “discriminan a Galicia”, cuestionando “por qué otras fuerzas políticas están dispuestas a hacerlo”, en clara referencia al PSOE a cuyos representantes echó en cara que “no tienen problema” a la hora de votar con “la extrema derecha de VOX y con el PP cuando se trata de impedir que se investigue la corrupción de la monarquía”.

Según indicaron desde el BNG, en unas cuentas que se incrementan un 20%, Galicia baja un 11% “y eso es lo que queremos cambiar” durante la tramitación.

De los datos de los nacionalistas se desprende que las enmiendas giran en torno a infraestructuras, políticas sociales y medio ambiente. En total, señaló Rego este lunes, “lo que tenemos claro en el Bloque es que vamos a defender los intereses de Galicia y eso significa que la inversión mínima debe ser de 1.000 millones de euros si el Gobierno Sánchez quiere contar con nuestro apoyo”.