No es la primera vez y tampoco será la última, porque la denuncia no responde al momento electoral actual, sino que está unido a las protestas que desde hace años mantienen los trabajadores de la Corporación Radio Televisión de Galicia contra la dirección del ente. Lo hacen todos los viernes en los espacios informativos en lo que denominan Venres negros (Viernes negros) a través de los que manifiestan su posición contraria al uso y la manipulación que se hace de la información a favor del Partido Popular y/o en contra de las formaciones de la oposición (BNG y PSdeG).

En el centro de todas la polémicas se encuentra el director general, Alfonso Sánchez Izquierdo, puesto en el cargo por ex presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y que su sucesor, Alfonso Rueda, decidió mantener.

A tenor de lo ocurrido en los últimos meses parece que las cosas no han cambiado y que las acusaciones de manipulación siguen acumulándose.

La última es de hoy mismo. La han realizado los nacionalistas que han decidido elevar al Parlamento autonómico, de nuevo, “la conflictividad laboral” que existe en la CRTVG, poniendo el acento en los “continuos ataques de la dirección” a la plantilla de trabajadores y al uso partidista que se hace del medio público para “favorecer los intereses del PP” gallego.

Así lo ha explicado la diputada, Alexandra Fernández, quien ha acusado a la dirección del ente público de “persecución, represalias y manipulación informativa”. Por estos motivos ha pedido responsabilidades a Sánchez Izquierdo por una manera de actuar que, como ha recordado, ya ha motivado “diversas sentencias judiciales a favor de los trabajadores”.

En este sentido, la parlamentaria ha afirmado que desde la dirección de la Corporación pública se “ejerce la represión” contra aquellos integrantes de la plantilla que “no aceptan la manipulación informativa” y la “manipulación del Partido Popular”.

Hoy, ante el Parlamento

Precisamente, coincidiendo con la celebración de la comisión de control del ente público un grupo de trabajadores se ha concentrado en las inmediaciones del Parlamento de Galicia con el lema de “no más abusos en la CRTVG”.

Ha sido más contundente Alexandra Fernández al indicar que ante el conflito laboral actual el director general ha respondido “echando gas y con una nueva escalada incendiando cada vez más la situación”. A su juicio, Sánchez Izquierdo ha pasado al empleo de “la amenaza y la coacción”.

A pesar de ello, la diputada nacionalista ha insistido en que la dirección no busca una solución aunque las setencias del alto tribunal gallego han indicado que la Corporación “reprime y vulnera los derechos fundamentales de los trabajadores”.

Asimismo, ha criticado que nadie rinda cuentas por estas resoluciones judiciales y que desde la Xunta no se pidan responsabilidades.

Se da la circunstancia, según ha añadido Alexandra Fernández, de que la propia ley de medios señala que el actual director de la CRTVG no puede seguir ocupando su cargo y por lo tanto “debe dimitir o continuar como verdugo de los trabajadores y de escudo humano de la corrupción del Partido popular”. 

Esta semana se cumple el Viernes Negro número 262 para denunciar la manipulación en los medios públicos gallegos.