La despoblación en Galicia es una pieza clave en las elecciones del próximo domingo. Los partidos políticos lo saben, todos ellos son conocedores de un problema que golpea con fuerza a la autonomía y, en consecuencia, es capaz de mover un volumen importante de voto. Por eso las formaciones que se presentan a la Xunta el 18F llevan propuestas en su programa para revertir la situación, y por eso la despoblación ha provocado, durante una campaña más, réplicas entre los distintos dirigentes. Pero, centrándose en las cifras: este es el mapa actual de la región gallega.
259 localidades han perdido población en la última década: las del interior, las más afectadas
La pérdida de habitantes, principalmente jóvenes y en la última década, es una realidad que muestran todos los mapas demoscópicos y que afecta prácticamente al conjunto de la comunidad. Concretamente, y tal y como muestra un análisis de Porcentual a partir de datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) al que ha tenido acceso ElPlural.com, de los 300 municipios que completan el lienzo de litoral, en 259 hay menos población ahora de la que había hace poco más de diez años, en 2013.
Los municipios de los que más personas se han ido se localizan en las provincias de Lugo y Ourense. Es decir, en la zona de interior de la autonomía. En números, los municipios, precisamente de Ourense, y de Ferrol, son los que más habitantes han perdido en los últimos años, tal y como refleja el mapa que se adjunta a continuación. La peor situación viene dada en los lugares que aparecen en color rojo.
Para hablar de una forma justa, y aunque la tónica habitual es la de la emigración, también hay municipios en las que la situación se da a la inversa, como son Oleiros, Ames, Arteixos o Santiago de Compostela, que han ganado más de 2.000 personas en los diez años precederos.
El siguiente mapa también proyecta que A Coruña, Vigo y Ourense son los municipios con mayor población de Galicia, superando todos ellos los 100.000 habitantes, pero también que hay unas 40 localidades que no superan el millar de personas. Si se viaja ligeramente en el tiempo, son precisamente 100.000 habitantes los que la comunidad autónoma ha perdido en diez años, entre 2011 y 2021, también según datos del INE.
“Desde que gobierna el PP somos menos gallegos”
Esta lacra ha centrado buena parte de la campaña del próximo domingo. La izquierda ha empleado dicha baza contra el PP de Alfonso Rueda en mítines y en debates electorales. A ello se refirió, por ejemplo y en un momento muy concreto del debate al que sí acudió el candidato popular, su homólogo socialista, José Ramón Gómez Besteiro.
“Desde que gobierna el PP, 15 años de manera ininterrumpida, somos menos gallegos (…) Perdemos casi 100.000 habitantes. Es como si de repente desapareciera Santiago de la faz de la tierra, mientras que España en el mismo periodo creció un millón de habitantes”, le decía a Rueda desde el atril.
Pero el escenario es similar para cualquiera de los datos demoscópicos, que vienen a verificar la pérdida de población en términos generales. Así, Besteiro destacaba que Galicia se ha quedado sin el equivalente a la población de Ferrol bajo color popular (un -5%), mientras España creció en un 6%, según datos de la Encuesta de Población Activa (EPA). En la misma línea, la deuda pública creció un 2,5%. “Casi se triplica”, decía Besteiro: “Es decir, en estos quince años: menos gente, menos empleo y más deuda”.
Propuestas de los partidos contra la despoblación
Todos los partidos incluyen en su programa propuestas contra la despoblación.
Programa del PSOE para recuperar población
El PSdeG-PSOE se refiera a “un nuevo enfoque para abordar las necesidades y los derechos de la Galicia exterior”, que pasa por el apoyo a los jóvenes que “se marcharon en los últimos años ante la falta de oportunidades”.
Asimismo, los socialistas se comprometen a reforzar las “políticas de retorno con incentivos vinculados al emprendimiento, la educación en las universidades gallegas y las políticas de lucha contra la despoblación”.
De igual manera, el PSOE promete trabajar para promocionar y revitalizar los centros gallegos y del asociacionismo en el exterior que “precisan un mayor apoyo, no solo financiero, sino también por ejemplo mediante nuevas alianzas con actores culturales gallegos de forma que puedan ayudar a proyectar la cultura y la lengua más allá de las propias comunidades”.
El partido de Besteiro defiende en su programa electoral la “mejora de la infraestructura digital”, la “conectividad” de la misma y el “acceso para todos, asegurando la inversión en infraestructura como la expansión de la banda ancha de alta velocidad y la cobertura 5G, especialmente en las zonas rurales y menos desarrolladas”.
También mantiene su intención de “redefinir el transporte público” para que “no haya zonas excluidas” y “hacerlo más atractivo para que los jóvenes lo usen”. En este sentido, la formación socialista quiere que se cumpla la regla de los 30 minutos. Esto es, que se presten servicios en un radio de al menos 30 minutos de recorrido que incluya atención sanitaria, centros educativo, el propio transporte público y las instalaciones asistenciales como puedan ser los centros de día o las residencias.
En el aspecto puramente económico, el PSOE promete dotar de una mayor prestación económica a los municipios que más sufren esta despoblación, con especial atención a los lugares de interior y a las provincias de Lugo y Ourense. Entre los puntos para combatir esta lacra, los socialistas proponen “reformular el Plan Estratégico de Turismo Rural”.
¿Qué plantea el BNG contra la despoblación?
En su hoja de ruta, el partido de Ana Pontón también cuenta con una batería de medidas pensadas, sobre todo, para el retorno de los emigrantes que “se fueron durante la crisis”.
La formación nacionalista propone implantar un plan de retorno y captación de profesionales que se fueron u optaron por la sanidad privada y facilitar el acceso a los jóvenes a un “trabajo digno”, financiar programas de conservación, restauración y rehabilitación de bienes patrimoniales para evitar “su expolio” y generar oportunidades de desarrollo económico, social y cultural para combatir la despoblación.
De igual forma, entre otras medidas se incluye el refuerzo de los centros de alto rendimiento deportivo, para evitar la emigración de deportistas, así como medidas contra la deslocalización de empresas asentadas en Galicia con políticas que lo impidan y elementos disuasorios que excluyan la percepción de ayudas y contratos públicos a las empresas que realicen el desplazamiento total o parcial de trabajo al extranjero.
Sumar: puntos claves de su programa contra la emigración juvenil
El partido de Marta Lois propone la creación de una Secretaría General de Ciudadanía Migrante, desde donde se desarrollarán las políticas dirigidas a la población migrante, o el impulso del plan Recupera Talento para captar y retener el talento del personal investigador.
También superar la brecha digital en el campo garantizando el acceso universal a Internet o la elaboración de un plan de empleo público en el medio rural que contenga medidas como el refuerzo de oficinas agrícolas regionales, centros de investigación agraria o de formación y extensión agroforestal. Además, para favorecer el regreso de los jóvenes a los municipios más afectados, proponen la FP de desempleados en oficios de rehabilitación de viviendas abandonadas y permitir la compra de estas viviendas abandonadas o casa rehabilitadas.
Podemos: medidas de los morados contra la despoblación
Para Podemos, el progreso y la regeneración rural “no será posible sin la provisión de ciertos servicios básicos de apoyo y mecanismos que corrijan los desequilibrios territoriales”. En cuanto a medidas concretas, el partido morado habla de abrir una línea de ayuda para la incorporación de personal destinado a cubrir necesidades de la población de zonas rurales como servicios de cuidados, de transporte a demanda y otras actividades; o la idea de Crear una Secretaría General de Ciudadanía Migrante que diseñe medidas para toda la población migrante.
Asimismo, implementará un Plan de Retorno, facilitando a las personas que vuelvan a Galicia el acceso a viviendas de protección oficial o ayudas para el alquiler. De igual manera, va en la misma línea que otras formaciones de izquierdas y pone sobre la mesa un plan de recuperación de talento científico y profesional o la creación de un banco de viviendas rurales en alquiler que ayuden a atraer y fijar población en estas zonas.
