Los alcaldes de los municipios cántabros de Villacarriedo y San Roque de Riomiera, el regionalista Ángel Sainz y el 'popular' Antonio Fernández han sido denunciados por asistir a una comida navideña en el interior de un restaurante en la que estuvieron también los exregidores de San Pedro del Romeral y Vega de Pas, Pedro Gómez y Víctor Manuel Gómez, y al menos dos personas más. 

"Abrió para nosotros y fuimos seis amigos", ha defendido tras conocerse los hechos, uno de los comensales, que ha manifestado que a él le invitó el dueño del establecimiento -'Casa Setién', en San Roque de Riomiera. 

El propietario, según este participante, también se sentó a la mesa y se encargó de servir, pero a "título particular". En este sentido, ha precisado que el local estaba "cerrado", aunque no el bar, en el que había "bastantes personas", que entraban a pedir y salían consumir a la calle.

Según este mismo testimonio suelen celebrar esta comida todos los años por Navidad y en esta ocasión lo hicieron el pasado miércoles, 30 de diciembre. Los involucrados sospechan que la denuncia la interpuso un concejal del PP de San Roque. 

"No éramos veinte ni mucho menos, ni dieciocho ni doce. Éramos seis", ha insistido uno de los políticos denunciados, que no ostenta cargo público en la actualidad, y que entiende que fue citado a una "reunión privada".

"En los pueblos, la gente de los restaurantes come en el local en Navidad", ha argumentado el exdirigente pasiego que, sin embargo, ha terminado por decir que "no lo teníamos que haber hecho". A su juicio, tiene claro quién dio la voz de alarma y cree que se trata de "rollos políticos",  "Cuando yo entré y pasé al restaurante, él estaba dentro del bar", ha recordado. 

Cs pide su dimisión

El coordinador de Ciudadanos en Cantabria, Félix Álvarez, ha exigido la dimisión de los alcades "que se fueron de comilona". "Tienen que dimitir de sus cargos de manera inmediata", ha dicho, subrayando que "se pasaron las normas anti covid por el forro de sus caprichos".  

Según ha señalado, no hay dudas de lo ocurrido, ya que lo han reconocido algunos de los asistentes a "esa vergüenza de comida", por lo que "tienen que asumir, además de la sanción administrativa que les corresponda, la responsabilidad política que conlleva saltarse las normas que tienen que cumplir, en algunos casos con mucho sacrificio, el resto de los ciudadanos".

"No es posible, ni asumible, ni decente, que los políticos le reclamen a los ciudadanos restricciones, esfuerzos y sacrificios y algunos de estos políticos, que tendrían que dar ejemplo con su comportamiento, se vayan de comilona con sus amigos a un restaurante", ha recalcado Álvarez. 

"Esperamos que tanto el PRC como el PP tomen las medidas oportunas con estos alcaldes en caso de que ellos no quieran asumir la responsabilidad de haberse reído de todos los cántabros", ha subrayado. 

"No hay excusa que valga"

En la misma línea se ha pronunciado el coordinador autonómico de Izquierda Unida. Israel Ruiz Salmón ha dic ho que dimisió es la "única salida válida" y que "no hay excusa que valga". 

"Llevamos un año con una crisis sanitaria, social y económica que nos ha arrebatado a seres queridos y ha afectado de forma contundente a trabajadores y empresas y, desgraciadamente, tenemos a gobernantes que, con actitudes completamente irresponsables, no cumplen con las más mínimas normas de conducta", ha criticado. 

"Cada minuto que pase sin que pongan su dimisión sobre la mesa, será un tiempo en el que la población pensará que las normas no son de aplicación para sus gobernantes, ampliando el desapego hacia la política que hechos como este provocan", ha advertido el líder regional de IU.