Sin pisicina pública en plena ola de calor. Así se encuentran los vecinos de Hortaleza (Madrid) ante el retraso en las obras que muchos llaman "chapuza".  La piscina de Hortaleza debería estar en funcionamiento desde hace meses. Sin embargo, se encuentra cerrada al público por unas obras que no tienen fin y que han sufrido constantes retrasos.  "Desidia e ineficacia", indican desde la oposición.

Son unos trabajos que deberían haberse realizado antes de que comenzara la temporada de piscinas municipales de verano, a mitad de mayo. Justo en mayo, el Ayuntamiento anunció que la piscina olímpica no iba a abrir hasta finales de junio debido a unas obras de "subsanación de patologías". "Las propias trabajadoras de la piscina ponían en duda esa fecha, debido al estado y ritmo de las obras: en ese momento, la sala de máquinas (que ahora se ha inundado) estaba sin cubrir, al aire, en un gran agujero junto al vaso olímpico, que entonces ni estaba completamente cubierto ni impermeabilizado", explica a ElPlural.com Lucía Lois, concejal de Más Madrid en el consistorio madrileño.

Lo cierto es que han sido numerosos los retrasos han impedido la apertura de la piscina, a pesar de que ya estamos a mediados de agosto e inmersos en la tercera ola de calor del verano. Pasaron las elecciones, pasó junio y la piscina seguía cerrada a cal y canto mientras se intentaban subsanar los errores en las obras que, recordemos, tendrían que haberse acabado hace tres meses y que han costado casi 2 millones de euros.

Muchos mantenían la esperanza en que abriera en la fecha que dio el Ayuntamiento de Madrid: el 13 de junio. No es la primera vez que piscinas municipales abren durante el periodo estival por algún retraso en las obras. De hecho, cuando comenzó esta temporada de piscinas que se adelantó al 13 de mayo, las piscinas de Moratalaz, Fuencarral, El Pardo, Tetuán y Moncloa-Aravaca estaban y algunas siguen cerradas esperando a que se finalizaran los últimos remates de las obras. 

Sin embargo, tal y como avanzaban las trabajadoras del centro deportivo, no iba a ser posible. En aquel momento, las obras seguían en el vaso de la piscina y en la sala de máquinas y faltaba urbanizar toda la zona de la obra y los alrededores.

Así se anunciaba otra fecha: el 20 de agosto. "Otro retraso más y una nueva fecha de apertura, el próximo fin de semana, que tampoco se va a cumplir", indica Lois con pesar. "Se ha comunicado a la instalación que será el 20 de agosto, pero está claro que la piscina de Hortaleza no va a abrir esta temporada. No nos creemos nada vista la chapuza monumental de unas obras mal planificadas y tan rematadamente mal ejecutadas", explica sobre el estado de las obras.

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Además de las obras, en junio se cesaba a la dirección de la instalación deportiva y el puesto sigue vacante. Sin embargo, la piscina no tiene agua. Ha sido necesario vaciar el vaso olímpico, recién arreglado y llenado con más de 300.000 litros de agua. "Para colmo, en el proceso de vaciado del vaso olímpico se ha inundado la sala de máquinas, también renovada y en obras hasta hace pocos días, terminando de rematar un desastre propio de 'Pepe Gotera y Otilio, chapuzas a domicilio'", indica la de Más Madrid.  

Según diversas fuentes, el agua estaba en muy mal estado y ha sido necesario vaciar y tirar los 300.000 litros de agua en plena época de sequías. "Según las trabajadoras, se había llenado parcialmente “a manguera”. Ahora tienen que vaciar más de 300.000 litros de agua que no llevaban ni un mes en un vaso recién reconstruido", denuncia Lucía Lois sobre la situación de la piscina de Hortaleza asegurando que es "un desperdicio descomunal en una situación de crisis climática".

Sin embargo, la situación no es nueva. Los 180.000 vecinos de Hortaleza llevan varios años sin poder disfrutar de sus dos únicas piscinas municipales en la misma temporada. En 2020 no se pudo abrir la misma que ahora está cerrada, también por obras en el vaso olímpico, y en 2022 fue la piscina del polideportivo Luis Aragonés la que permaneció cerrada. "Es un completo desastre de gestión por parte de Almeida, que año tras año pagan las vecinas y vecinos de Hortaleza", indican en la formación de Rita Maestre.

La única solución de los vecinos de Hortaleza para refescarse es ir precisamente a esa, la de Luis Aragonés. Sin embargo, no es fácil. Aparte de estar saturada por la gran cantidad de gente, ir sin coche supone un problema. De una piscina a otra apenas hay 12 minutos en coche, pero si se apuesta por el transporte público se va a más de media hora con las frecuencias de agosto y 41 minutos a pie. Mientras tanto, hay que soportar temperaturas cercanas a los 40 grados. 

De hecho la cola es kilométrica para entrar al recinto de la piscina de Luis Aragonés. La cantidad de gente del distrito que busca refrescarse acude en masa e, incluso, moverse dentro del agua resulta complicado ya que son cientos de personas las que acuden y permanecen dentro del agua.