El Ministerio del Interior ha movilizado hacia Cataluña de manera progresiva un contingente de hasta 4.000 agentes de Policía Nacional y Guardia Civil para reforzar la presencia de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado de cara a impedir el referéndum independentista del 1-O. Encontrar alojamiento a un número tan elevado número de agentes no está resultando una tarea fácil para el Ministerio, entre otras cosas porque algunos hoteles se han negado. El Gobierno ha habilitado el Cuartel de Manresa y fuentes de Interior han señalado que piensan contactar con compañías navieras para alojar a los agentes pendientes de incorporación en caso de que fuera necesario.
Cuatro por camarote
Las indicaciones de uno de los últimos desplazamientos han sido publicadas por El Español , se trata de una comunicación en la que se ordena la salida el jueves por la mañana hacia Barcelona de tres grupos de la Unidad de Intervención Policial (UIP) -los denominados antidisturbios- y el regreso en 10 o 15 días. En cada camarote de los barcos se alojarán cuatro policías en régimen de pensión completa sin derecho a percibir dietas.
Por otra parte, las direcciones generales de la Guardia Civil y de la Policía Nacional, coordinadas por la Secretaría de Estado de Seguridad de Interior, a cursar una instrucción que modifica el régimen de vacaciones, permisos, licencias, jornada y horarios del personal que participa en el dispositivo extraordinario. Interior asegura que, excepcionalmente, se podrá prorrogar el período de vigencia de la orden que anula vaciones y permisos si las circunstancias así lo aconsejaran.
Se pretende impedir la celebración del referéndum y también reforzar e incrementar la seguridad de edificios del Estado, como oficinas del Gobierno central, de la Agencia Tributaria y la sucursal del Banco de España.
