Este domingo los Comités de Defensa de la República (CDR) han escogido la playa del Varador de Mataró para poner cruces amarillas hechos con toallas. Pero un hombre ha tenido que ser escoltado por los Mossos d'Esquadra cuando ha irrumpido en medio de la acción de los CDR y ha intentado sacar las toallas.

Unas 150 personas han extendido a la arena fragmentos de toalla amarilla en forma de cruz. Han reconvertido así la plantada de cruces que se había anunciado inicialmente a las 8 de la mañana en defensa de la "libertad de expresión" y por la liberación de los "presos políticos". Cuando estaban a punto de iniciar una gincana, el hombre intentado deshacer las cruces arrastrando los pies y un grupo de personas lo ha rodeado para frenarlo. Entre gritos de 'Somos gente de paz' y 'No lo tocáis', el hombre se ha quejado que le habían clavado golpes y pellizcos al empezar a conversar con una de las mujeres entre una nube de cámaras.

Poco después han intervenido los Mossos y la Policía Local, que se lo han llevado escoltado de la arena. El alcalde de la ciudad, David Boto (PSC), había anunciado que los cuerpos policiales intervendrían para impedir que se llevara a cabo la plantada de cruces a la playa.