El Govern ha cesado de manera inmediata al gerente de la Entidad Pública Empresarial de Telecomunicaciones e Innovación (Ibetec), Juan Antonio Serra Ferrer, tras conocerse las acusaciones formuladas contra su persona y la apertura de juicio oral. La Fiscalía pide para él tres años de cárcel por presuntamente intentar besar y lamer la cara a una desconocida en un restaurante de Palma y propinar un puñetazo a uno de los policías que lo detuvo cuando intentaba huir en mayo de 2022, según informa el Diario de Mallorca.

Tras tomar la decisión de cesarle, el Govern ha reiterado su compromiso y absoluto rechazo a todas las formas de violencia contra las mujeres y su compromiso de poner todos los recursos y medidas en la protección de las mujeres y en la lucha contra esta lacra social. Serra Ferrer es licenciado en Economía y en Administración y gestión de empresas, y antes de formar parte del Ejecutivo balear, compaginó su trabajo en una empresa del sector sanitario con su labor como profesor asociado en la UIB, momento en el que ocurrieron los hechos. Ante la repercursión y el revuelo que causó su detención, la institución académica le expedientó y le suspendió de su puesto docente. "Cualquier conducta que atente contra la dignidad y los derechos de las personas no es tolerable para una institución que mantiene un firme compromiso social y busca transmitir los valores cívicos y democráticos", señaló entonces la UIB en un comunicado. Unos meses después, tras el ascenso al Govern de Marga Prohens en detrimento de Francina Armengol, fue rescatado para ocupar el puesto de gerente de Ibetec, a pesar de conocerse a la perfección su caso.

Sobre estos hechos se ha pronunciado Silvia Cano, diputada del PSOE en el Parlament balear y Secretaria de Igualdad del partido en la región. "Las informaciones que hemos conocido esta mañana son, de todo punto, inadmisibles. Aplaudimos el cese por parte del Govern, aunque nos sorprende muchísimo que Costa fichase a este hombre conociendo sus antecedentes, por tanto, tiene que dar muchas explicaciones", ha argumentado, afeando que se incorporase a la dirección autonómica a una persona que había sido detenida por esta clase de conductas, y que no haya sido hasta el momento en el que la Fiscalía ha pedido una pena de prisión cuando ha sido cesado.

"A su vez, este cese es insuficiente, porque queda otra persona, el gerente de los Servicios Ferroviarios de Mallorca. Pedimos su dimision inmediata porque con sus recientes tuits ha denigrado al conjunto de las mujeres, unos tuits misóginos y machistas", ha añadido, refiriéndose a José Ramón Ortá y a varios mensajes publicados en sus perfiles sociales, en los que compartió fotografías de las protestas en Ferraz y las muñecas hinchables que algunos manifestantes llevaron para referenciar a las ministras socialistas.

Delitos de abuso sexual y lesiones

La Fiscalía imputa a Sierra Ferrer un delito de abuso sexual, dos de lesiones y otro de atentado contra agente de la autoridad. La jueza instructora ha dictado un auto de apertura de juicio oral, con carácter inapelable, en el que también ordenará al denunciado a depositar una fianza de 3.857 euros a los dos perjudicados.

De acuerdo con el escrito provisional de la Fiscalía, los hechos ocurrieron durante la medianoche del 28 de mayo de 2022 en un restaurante del Passeig Mallorca, en el centro de Palma. Serra Ferrer, "con una evidente intención libidinosa", se aproximó a una mujer que estaba en el local con su familia y amigos, y a la que no conocía de nada. "La abordó cuando estaba sentada, agarrándola fuertemente de la cabeza para intentar besarla. La víctima opuso resistencia, pero el denunciado insistió y le lamió toda la cara", reza el escrito.

Tras los hechos, se vivieron momentos de tensión en el local y una persona comunicó lo ocurrido a la Policía Nacional. A la llegada de los agentes, Sierra Ferrer trató de huir, pero fue atrapado, y en el momento de su captura, le propinó un puñetazo en la mandíbula a uno de los agentes y forcejeó con él, causándole lesiones en un hombro. Fue detenido y trasladado a comisaría, quedando en libertad horas después.

Pese al procedimiento judicial abierto contra él por la agresión sexual y a su despido de la Universidad, fue incorporado al Govern el pasado 2 de agosto con el cargo de director gerente del Ibetec, la entidad pública que gestiona las torres de telecomunicaciones de Balears, adscrita a la conselleria de Economía y Hacienda. Un puesto por el que, hasta el momento de su cese, Ferrer estaba percibiendo 57.000 euros anuales.

A su vez, el Ministerio Fiscal aporta en su escrito que la mujer afectada "sufrió lesiones cervicales y ansiedad, así como un agravamiento del trastorno mental que ya padecía", y que el agente de policía al que agredió tuvo que ser atendido en un centro médico y tardó dos semanas en recuperarse de las contusiones que le provocó el forcejeo y el puñetazo en la mandíbula.