En 1996 Jordi Pujol se paseaba por tierras onubenses exaltando los valores del trabajo y el esfuerzo. Por eso, y antes de ir a Sevilla, visitó las localidades freseras de Cartaya y Lepe. El ex presidente de la Generalitat felicitaba es esa cita a  vecinos y a las autoridades locales por su tesón capacidad de iniciativa e innovación. El presidente de la Generalitat visitó estas dos localidades, que se habían convertido en pocos años en las zonas líderes en Europa y segundas del mundo en producción de fresas.

Acuerdo municipal por unanimidad
Por motivo de la visita de tan importante autoridad autonómica el Ayuntamiento de Cartaya convocó un pleno con carácter de urgencia para nombrar a Pujol y a su esposa, Marta Ferrusola, hijos adoptivos de la villa. No hubo duda alguna y el acuerdo se tomó por unanimidadde los tres grupos representados en el Consistorio, PSOE, PP y PA. En la población de al lado, Lepe, su alcalde, José Orla, también socialista como el de Cartaya, le hacía entrega de las llaves de la ciudad. La senyera acompañaba a las banderas española, andaluza y europea en edificio consistorial.

Pujol alabó el trabajo y el esfuerzo
Las vueltas que da la vida tras conocerse las millonarias cantidades de dinero que el entonces, y aun todavía Molt Honorable, ha guardado en paraísos fiscales a escondidas de la Hacienda española. Si entonces alababa el esfuerzo y el trabajo como símbolos del desarrollo de una sociedad, hoy los representantes de esa sociedad que lo designó Hijo Adoptivo, al menos en Cartaya, quieren retirarle el título.

De Molt Honorable a repudiado
Y es que tras conocerse el feo asunto de los paraísos fiscales de Pujol, los socialistas de Cartaya, ahora en la oposición, han pedido al alcalde que se inicie los trámites para anular y revocar el título de Hijo Adoptivo de la Villa de Cartaya concedido en 1996 al expresidente catalán y a su esposa.

Indigno de poseerlo
Apelan los socialistas a que en el reglamento de honores municipales se recoge que si alguno de las personas con título concedido "llegase a ser indigno de poseerlo por causas que afecten gravemente al honor, la Corporación Municipal ha de retirárselas". Para el portavoz del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Cartaya, Alexis Landero, lo conocido tras la confesión del ex President "hace indigno que Pujol y su esposa gocen de la distinción que Cartaya le concedió hace ahora 18 años".