“El Gobierno andaluz cambia la fecha del Debate del estado de la Comunidad para que no coincida con el circo de Abascal en el Congreso. Moreno Bonilla quiere desvincularse de la ultraderecha cuando es la que lo mantiene en el poder. Una sumisión absoluta”.
Con este tuit en su cuenta oficial ha interpretado el portavoz del Grupo Socialista, José Fiscal, el adelanto en 24 horas de la fecha prevista para celebrar el principal debate anual del Parlamento autonómico
Fiscal ha mostrado el rechazo del PSOE de Andalucía al adelanto de fecha del Debate sobre el Estado de la Comunidad “promovido por las derechas al frente de la Junta con el apoyo de la ultraderecha para evitar su total coincidencia con el debate de la moción de censura planteada por Vox en el Congreso de los Diputados”, y ha criticado que PP y Cs actúan “en menoscabo de la autonomía andaluza” y “pliegan el Parlamento y el Gobierno a los dictados de Abascal”.
José Fiscal ha explicado que el Grupo Socialista ha votado en la Junta de Portavoces en contra de la celebración del Pleno los días 20 y 21 de octubre, una jornada antes de lo inicialmente programado, porque “el objetivo único” de los grupos de gobierno es “que no se visualice que, mientras Abascal monta un circo en el Congreso en Madrid, en Andalucía el presidente a quien sostiene el propio Abascal esté en el Debate sobre el Estado de la Comunidad” ofreciendo su propio discurso.
Para el portavoz socialista, el argumento esgrimido por la presidenta de la Cámara, Marta Bosquet, para justificar el adelanto del Pleno “se cae” porque su segunda jornada sigue coincidiendo con la moción de censura en el Congreso, por lo que ha cuestionado que desde los grupos de la derecha andaluza consideren “que el debate y aprobación de las propuestas de resolución sean menos importantes que los discursos del primer día” de la sesión plenaria autonómica.
Fiscal ha insistido en censurar que Moreno Bonilla y los grupos que le sostienen al frente de la Junta con el apoyo de la ultraderecha tienen al Ejecutivo de Andalucía y al Parlamento autonómico “plegados a lo que dicta Abascal en Madrid, como ocurre desde el primer día en que se conformó este Gobierno”.
