La organización no gubernamental Amnistía Internacional (AI) ha llevado hoy a cabo en las calles de Sevilla capital un acto en el que, bajo el lema "Mi cuerpo, mis derechos", ha desplegado tres muñecas hinchables para rechazar la represión sexual y reivindicar los derechos humanos y reproductivos.

Jornada informativa en la Plaza de la Encarnación
El acto, desarrollado en la plaza de la Encarnación, ha consistido en una jornada informativa, de recogida de firmas y de denuncia por los castigos que sufren mujeres y hombres en muchos países por no ajustarse a las normas impuestas a la reproducción y a su sexualidad. La campaña rechaza también las sanciones penales, incluida la pena de muerte en algunos países, que sufre los homosexuales.

Tres muñecas hinchables
Para reivindicar los derechos sexuales y reproductivos, Amnistía Internacional ha desplegado tres muñecas hinchables a tamaño real que simbolizan la antítesis de estos derechos, un objeto "despojado de su capacidad de decidir sobre su cuerpo, su libertad y su sexualidad", ha declarado a Efe el coordinador en Sevilla de AI, Juan Archilla.

Utilización del cuerpo femenino
"No son dueñas de su cuerpo y representan la utilización inanimada del cuerpo femenino", ha indicado Archilla, que ha explicado que la campaña busca acabar con el control externo del cuerpo, principalmente de mujeres y niñas en muchos países de Oriente Medio, africanos y asiáticos. La iniciativa ofrece a los ciudadanos que la apoyan la posibilidad de fotografiarse con las muñecas hinchables de la campaña junto a un fondo con el hashtag #micuerpomisderechos para difundir los contenidos en la redes sociales.

Críticas a la futura Ley del Aborto
El coordinador de AI ha criticado, en este sentido, la futura de ley del aborto española, de la que ha dicho que contiene aspectos "regresivos" y "carece" del consenso que tenía la anterior norma, por lo que ha confiado en que no sea aprobada tal y como esta redactada y sufra modificaciones.

No usan anticonceptivos 215 millones de mujeres
Según AI, 215 millones de mujeres no utilizan en el mundo anticonceptivos pese a que no desean tener más hijos; el 40 % de mujeres en edad de procrear viven donde el aborto está prohibido; unas 47.000 mujeres embarazadas mueren todos los años por complicaciones de abortos no seguros y 76 países del mundo tipifican como delito la homosexualidad.