Las elecciones andaluzas van a tener una derivada nacional muy importante: “Sacarle tarjeta roja a Pedro Sánchez y sus socios y a las malas políticas que están haciendo”. Es lo que hay dicho esta mañana ante los micrófonos de la Cadena COPE el ya presidente en funciones de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, que ayer firmó el decreto de disolución del Parlamento y la convocatoria de elecciones para el 19 de junio.

Asegura el mandatario conservador andaluz que le es “indiferente” si Pedro Sánchez participa o no en la campaña electoral del PSOE, pero considera que el presidente del Gobierno “no es el mejor cartel posible, tiene unos socios que asaltan al Estado desde el Estado, con la connivencia del Partido Socialista, asaltan la Corona, nuestras libertades, nuestras costumbres… eso erosiona a Sánchez”.

En cuanto a la extrema derecha, Moreno admite que “Vox es una marca muy poderosa que no depende de qué candidato pongan”, pero está convencido de que podrá lograr una mayoría suficiente para gobernar en solitario: “Si Vox no se presentara, yo tendría mayoría absoluta; no la tendré pero aspiro a quedar muy cerca”.

A preguntas de Carlos Herrera, conductor del programa, Juan Manuel Moreno se ha extendido en detallar los éxitos económicos de su Gobierno, que en su opinión se verían dramáticamente enmendados si el PSOE volviera al poder: “Somos la tercera economía de España, y estoy convencido de que vamos a superar a Cataluña con las políticas adecuadas, tenemos récord de exportaciones, de inversión extranjera, de autónomos, de empresas, y lo hemos hecho bajando impuestos, lo que nos ha permitido sumar 280.000 nuevos contribuyentes y recaudar 925 millones de euros más; queremos ser la primera economía de España, la Baviera de España y no estoy diciendo ninguna gilipollez”.

Además de recalcar que antes Andalucía era noticia por la corrupción –“los socialistas pensaban que esto era su cortijo”– y ahora lo es por sus logros económicos, Moreno ha repetido que tenía que convocar las elecciones ya para poder tener aprobados a finales de diciembre los presupuestos de 2023.

También ha mencionado los problemas derivados de la inflación como otro de los motivos que le ha llevado a adelantar las elecciones: “Hay obras ya adjudicadas que se empiezan a paralizar por el incremento disparado del precios de los materiales, muchos pequeños constructores no pueden asumir esa inflación y necesitan un modificado, eso lleva mucho trámite, ya que el Parlamento debe convalidar cada modificación presupuestaria. No puedo permitirme paralizar proyectos. Necesitábamos un presupuesto. Si todo va bien, a finales de julio hay gobierno y en noviembre presentamos el presupuesto al Parlamento”.