La situación sanitaria en Andalucía es preocupante y la gestión de esa situación lo es aún más. Los datos de contagios están completamente disparados. La Comunidad ha aumentado su tasa de incidencia de Covid-19 por cada 100.000 habitantes en las últimas dos semanas hasta un 626%.

Mientras, el Gobierno de Moreno Bonilla primero quiso salvar la Navidad y ahora quiere salvar Sierra Nevada y la caza. ¿Y cuándo se tomará en serio salvar a los andaluces y andaluzas?. Es intolerable que estén jugando con nuestra salud.

Los sanitarios están cada día más agotados y los hospitales cada día más colapsados, pero las soluciones que se adoptan por parte de la Junta de Andalucía son cada día más improvisadas y chapuceras.

Las últimas han sido convertir una cafetería en UCI en el Hospital Regional de Málaga.  Y hace unas semanas trasladaron a otra cafetería, la del personal del Hospital Clínico, el Hospital de día.

No se entiende la apuesta de Moreno Bonilla por las cafeterías cuando tiene un Hospital, el de Estepona, acabado desde hace año y medio y sigue cerrado. Un hospital donde hasta ahora sólo ha abierto sus puertas cuando el Consejero de Presidencia, Elías Bendodo, ha ido al municipio para hacerse fotos. Pero cuando por fin se abra dentro de unas semanas, parece que no lo harán ni las urgencias ni los quirófanos. Cortarán la cinta, pero funcionará bajo mínimos.

Tampoco se entiende el porqué desmantelan el Hospital Materno. Desde el primer día que llegó el PP al Gobierno andaluz tuvieron muy claro deteriorar la atención sanitaria para las mujeres. Ahora dan dos pasos más en ese objetivo, el primero dejar un espacio mínimo para atender todo lo referente a la atención ginecología y el segundo, aún peor, pretenden reducir la actividad quirúrgica en los quirófanos de maternidad de este hospital.

Si necesitan más espacio para atender a los pacientes la pregunta es ¿qué fue de la habilitación del pabellón deportivo Carranque como Hospital de campaña dotado de 400 camas? ¿Qué fue de él o tan sólo fue otra propaganda más de Bendodo, Marín y del Presidente Moreno Bonilla?

Por otra parte, el ataque de la Junta de Andalucía a la Atención Primaria no ceja. Los enfermos siguen siendo atendidos por teléfono. Y cada día hay más malestar, porque los pacientes quieren ser atendidos directamente por su médico.

Son cada día más los que deciden ir a la privada, porque allí sí son atendidos presencialmente. Las preguntas son: ¿Por qué en la privada se pueden atender a los enfermos directamente y en la pública no? o ¿Cómo se detecta un cáncer o un ictus por teléfono?

Las listas de espera se han triplicado desde que Moreno Bonilla llegó al Gobierno de Andalucía, y los que están haciendo el negocio del siglo son los de la privada. Está es la política que siempre ha querido el PP, y ahora la aplican en Andalucía.

Moreno Bonilla se está burlando de los andaluces y andaluzas. Deteriora la sanidad pública, no incrementa los sanitarios, se carga la atención directa a los pacientes y colapsa los hospitales.  En definitiva está abandonando nuestra sanidad y abocando a la ciudadanía a acudir a la privada.

 

Miguel Ángel Heredia Díaz

Senador del PSOE por Málaga