El coordinador general de Ciudadanos en Andalucía y vicepresidente de la Junta, Juan Marín, será el próximo candidato de la formación naranja en las elecciones autonómicas. Ha conseguido superar a sus adversarios con el 58,3% de los votos de los afiliados en la elección que se ha celebrado entre ayer lunes y hoy martes.
El principal rival de Marín ha sido el diputado Fran Carrillo, que ha obtenido el 32,2% de los votos. A él le siguen Elena Bago, con el 5,2%, y Carmen Almagro, con el 2,5%. Han participado en el proceso un total de 1.412 militantes de los 2.589 afiliados de Ciudadanos en Andalucía que habían sido convocados a la cita.
Esta convocatoria se ha llevado a cabo de forma exprés, ya que se fue convocada hace tan solo una semana. No obstante, se han establecido como un mero trámite, ya que Marín contaba con el apoyo de la dirección de Inés Arrimadas y la consejera de Igualdad y Políticas Sociales, Rocío Ruiz, uno de los referentes del sector crítico, había renunciado a presentarse.
Pese a ser corto, el proceso no ha quedado exento de polémica y ha estado rodeado de denuncias de juego sucio y de maniobras de la dirección nacional para favorecer la candidatura de Marín. La desconfianza ha sido tal que los rivales del vicepresidente de la Junta han llegado a enviar apoderados a Madrid para fiscalizar la limpieza en el recuento final de los votos emitidos por los afiliados.
Juan Marín, que repite como candidato a la Junta, tiene la ardua tarea de afrontar los fatales resultados que le pronostican las encuestas, que no le dan más de tres escaños, mientras que en las pasadas elecciones consiguieron 21 diputados. Ya no es la primera vez que Marín concurre en unas primarias y las gana. En 2018 se impuso con un 67% de los apoyos.
