El portavoz adjunto del grupo parlamentario Adelante Andalucía, José Ignacio García, no se ha andado por las ramas y ha pedido al presidente de la Junta que destituya al consejero de Educación, Javier Imbroda, por su “incapacidad manifiesta y sostenida en el tiempo” para gestionar la educación en Andalucía.

De hecho, ayer varios cientos de interinos se concentraron frente a la sede de la Consejería para recriminarle a Imbroda sus nuevas instrucciones de currículum, que supondrán “un recorte de docentes”. El sindicato minoritario USTEA cifra en “casi 1.500 aulas públicas las suprimidas en Andalucía”, mientras que la enseñanza concertada “ha crecido ligeramente”. “Sólo en el curso 2018-19 se han suprimido 487 aulas en el tramo de la Educación Infantil y Primaria”, asegura el sindicato.

No menos crítico se ha mostrado hoy el secretario general del Grupo Parlamentario Socialista, Rodrigo Sánchez Haro, que ha acusado al consejero de provocar el caos al hacer el reparto de vacantes entre docentes de Primaria sin haber consensuado previamente los criterios con sus representantes.

Según la denuncia socialista, ha profesores se han quedado sin vacantes teniendo más de diez años de antigüedad, mientras que hay especialidades en las que se han adjudicado vacantes a interinos con menos de un mes de servicio.

Según el diputado, las escuelas infantiles también están "en pie de guerra porque la Junta está retrasando a 2020 la prometida subida de precios por plaza" en un 15 por ciento. El PSOE exige la convocatoria de la Diputación Permanente del Parlamento para que comparezca Imbroda.

El último conflicto que le ha estallado al consejero Imbroda ha sido el derivado del cese laboral de 73 trabajadoras de escuelas infantiles de distintas provincias que, tras 12 años contratadas en las empresas privadas que gestionaban los centros, ven peligrar sus empleos porque la Junta no asumirá sus contratos al hacerse cargo directamente de dichas escuelas.