El expresidente José Antonio Griñán declara ante el Supremo la semana que viene y su antecesor Manuel Chaves lo hace la siguiente, ambos en calidad de imputados por el caso de los ERE aunque no en sentido de serles atribuido algún delito concreto; si eso ocurriera, tendrían que dejar sus actas de senador y diputado, según el compromiso reiterado de la secretaria general del PSOE andaluz, Susana Díaz. El PSOE-A no prevé la elección por el Pleno del Parlamento de los nueve senadores en representación de la comunidad autónoma hasta el mes de junio y aún no ha tomado una decisión sobre la "continuidad o no" del expresidente de la Junta José Antonio Griñán, que ocupó plaza en la Cámara Alta unos meses después de ceder la Presidencia de la Junta a Susana Díaz. El partido confía en que antes de que llegue esa fecha el instructor de la causa de los ERE en el Supremo, Alberto Jorge Barreiro, haya tomado una decisión sobre el futuro procesal de ambos mandatarios. De acuerdo con la nueva distribución de fuerzas en el Parlamento andaluz tras las elecciones del 22 de marzo, los 47 diputados del PSOE-A se traducen en cuatro senadores en representación de la comunidad, los mismos que obtuvo hace tres años con los mismos escaños, mientras que el retroceso electoral del PP-A, que ha pasado de 50 a 33 diputados, le deja con tres representantes por esta vía en la Cámara Alta frente a los cuatro obtenidos en 2012. Por su parte, IULV-CA pierde su único senador y Podemos y Ciudadanos consiguen uno cada uno. "Cuando llegue ese momento se tomarán las decisiones que sean razonables", ha indicado el exportavoz del Grupo Socialista Mario Jiménez, quien ha recalcado que no hay ninguna decisión sobre la "continuidad o no" de los actuales senadores socialistas en representación de la comunidad.