La cara de ayer de Juan Ignacio Zoido era todo un poema mezcla de cinismo y de simulación teatral. Y es que defender unos presupuestos que incumplen por segundan vez el Estatuto de Autonomía y que suponen "la madre de todos los recortes" es un ejercicio difícil de asimilar.

Casi todos los analistas coinciden en que el hachazo de Rajoy a Andalucía persigue dos objetivos. Por un lado contribuir a la reducción del déficit del Estado pero dada la importancia de Andalucía, exigiéndole un esfuerzo superior. Los desmanes de la banca y de algunas manirrotas autonomías por voluntad del Gobierno de la Nación deben de pagarlo los andaluces y las andaluzas más que otras comunidades.

Pero por otro lado el recortazo forma parte de la estrategia diseñada en Génova 13 de intentar asfixiar por lo civil o por lo penal, por tierra, mar y aire a un gobierno, que como el andaluz ni se pliega a los designios conservadores ni aplica las políticas retrógradas de otros lares de la derecha. Estos presupuestos para Andalucía suponen la venganza del PP y la de Javier Arenas. Todavía se recuerdan las arengas de Arenas en campaña afirmando que si gobernaba la Junta el Ejecutivo de Rajoy se volcaría con Andalucía ¿Dónde está Javier Arenas? ¿Dónde su voz reivindicativa frente a la enésima afrenta a Andalucía? Está refugiado en la sede nacional conspirando contra Cospedal, intentando su rehabilitación política y maldiciendo el día que su dedo puso a Zoido como sucesor. Ahora Zoido hace causa común con Cospedal y Arenas, como siempre, con quien pueda.

Si ayer Zoido hizo un notable ejercicio de mentira, hipocresía y cinismo al bendecir unos presupuestos que suponen una canallada económica para el pueblo andaluz, hoy su número dos, José Luis Sanz, lo ha intentado emular pero con menos éxito. En esto del teatro y la escenificación el presidente del PP andaluz es todo un "artista". En capacidad de análisis político es una torpeza andante pero en el arte de Talia es un maestro consagrado. Sanz intentando defender los impresentables presupuestos y su falsa benignidad para Andalucía ha sufrido dos deslices dialécticos llegando a decir en primer lugar que "al PP andaluz no le gustan las cuentas" que le envía por paquetería urgente "MontoroSeur" y que es cierto que "ha bajado la inversión".

Con artistas del toreo político como estos peperos, con un hábitat político embargado de cinismo, mentiras y representación teatral que practican, los socialistas poco tienen que temer en el futuro. Griñán y los dirigentes socialistas andaluces solo tendrán que dedicarse a gobernar y a hacerlo lo mejor posible por el bien de todos los andaluces. De las cuestiones electorales y de ganar comicios ya se encarga el enemigo. Si un torero de verdad, Rafael Guerra Bejarano "El Guerra" resucitara y viera estos presupuestos contra Andalucía les diría a Zoido, Crespo, Sanz y compañía los siguiente: "No os afanéis en defenderlos. Lo que no 'pue sé' no 'pue sé' y además es...¡imposible!