Todas las resistencias a dimitir del hasta ahora alcalde de Granada, José Torres Hurtado, se han resentido cuando se anunciaba esta mañana que el portavoz municipal del PSOE, Francisco Cuenca y el líder provincial de Ciudadanos, Luis Salvador, habían sellado un acuerdo para desalojar a Torres Hurtado de la Alcaldía. Tras este anuncio de acuerdo para la moción de censura y la consiguiente pérdida para el PP de la una de las dos capitales andaluzas, las presiones locales, regionales y nacionales del Partido Popular sobre el regidor han terminado siendo letales y finalmente, Torres Hurtado ha cedido y ha presentado su dimisión esta tarde.

"Morir matando"
Pero Torres Hurtado ha "muerto matando". A pesar de que tan solo hace 24 horas aseguraba que estudiaría su futuro político una vez que declarase el 12 de mayo ante el juzgado, la opción de irse pero arrastrando en su caída al gran enemigo interno y serio aspirante a sustituirlo, el presidente provincial del PP, senador y primer teniente de alcalde, Sebastián Pérez, le ha seducido más. Torres Hurtado, solo, abandonado por su partido y acosado desde Génova y desde el PP andaluz, ha preferido vengarse de Sebastián Pérez, cortarle el paso a la alcaldía y sumar un dos por uno en dimisiones. Ha puesto como condición a la dirección nacional que Pérez le acompañara y esta, tras ver el "cielo abierto", ha aceptado la condición letal del hasta ahora alcalde.

Junto a Torres Hurtado y Sebastián Pérez, también ha dejado el cargo la concejala de Urbanismo, Isabel Nieto, que también fue detenida el miércoles pasado por su presunta implicación en una trama de corrupción urbanística. Nieto estaba además imputada por otro caso urbanístico.

Sebastián Pérez ha anunciado que presenta su renuncia como teniente de alcalde y número dos del Ayuntamiento y ha subrayado que lo hace por exigencia del regidor. "Primero es la ciudad. Luego el partido", ha dicho el presidente del Partido Popular de Granada y ha confesado que cesa porque así se lo ha pedido la dirección regional y nacional. "Es una condición que no entiendo ni en lo personal ni en lo político pero que respeto, y como lo primero para mí es Granada y mi partido, he presentado también mi renuncia sin tener absolutamente nada que ver en ninguna trama" de corrupción, ha dicho. "Si para que todo esto ocurra el problema que tiene el alcalde se llama Sebastián, aquí no pasa absolutamente nada. Yo seguiré al frente mi partido con ilusión y entusiasmo" y defendiendo, ha dicho, los intereses de Granada como senador.

"Lo hago con mucha entereza y fuerza y sabiendo que lo mejor en mi trayectoria política está por llegar. Lo he hecho por el bien de mi partido", ha agregado.

Crear un cortafuego para que C´s no firme la moción de censura
Se deduce que este movimiento táctico del PP es un paso para evitar la moción de censura anunciada hoy por Ciudadanos y PSOE. De esta forma el PP granadino va a esperar la siguientes jugada en el tablero de la oposición para proponer un candidato a la alcaldía. A partir de ahora los populares con este paso intentan crear un cortocircuito para pedir a Ciudadanos que no firme la moción de censura y acepte que sea un nuevo candidato que obviamente, ya no serían ni Torres Hurtado ni Sebastián Pérez.