El Consejo de la Juventud de Andalucía (CJA) es uno de los órganos que existen para asegurar la participación de los jóvenes en el orden democrático. Pero desde el pasado día 12, se ve envuelto en la polémica y descabezado. El hasta ahora presidente, Daniel Valdivia Alonso, denuncia haber sido apartado de sus funciones por la Junta de Andalucía.

El presidente del órgano colegiado que da voz a la juventud andaluza afirma que su salida de la presidencia obedece a “motivaciones políticas de la Junta”, ya que se produce a solo diez días de la próxima Asamblea del CJA. Daniel Valdivia asegura que la Junta de Andalucía pretende tomar el control y “cercenar la libre participación de los jóvenes”.

Consultadas por El Plural, fuentes del Instituto Andaluz de la Juventud desmienten tajantemente “haber cesado” a Valdivia. El fin de la presidencia obedece simplemente al proceso de regulación administrativa al que se ven sometidas todas las entidades que forman parte de la Asamblea del CJA, de cara a su renovación, para así poder recibir las subvenciones que les corresponden.

Por Decreto, las entidades inscritas que no cumplen serán dadas de baja. Los requisitos legales implican tener actividad, no superar los 30 años o tener sede social y composición estatutaria. Desde la Junta aclaran que no se cesa al presidente del CJA, sino que la entidad a la que él representaba, denominada ‘Activando Europa’, no cumplió con la actualización de datos y no respondió a requerimientos en los últimos 8 meses.

La baja en el censo de Entidades de Participación Juvenil de ‘Activando Europa’ implica la pérdida de la condición de miembro de Daniel Valdivia y, por tanto, de su presidencia, “el proceso de baja de una asociación del censo es totalmente garantista”, aseguran desde el IAJ. Sin embargo, Valdivia afirma que estamos ante una maniobra de control del principal ente de la juventud andaluza.

El artículo 48 de la Constitución Española nos dice que los poderes públicos deben promover la participación libre y eficaz de la juventud en el desarrollo político, social, económico y cultural.

El CJA está dentro del sistema de representación civil y formaba parte de la red de Consejo de Juventud de España para garantizar el derecho de participación y el asociacionismo juvenil. El Consejo goza de autonomía e independencia para el ejercicio de sus funciones representativas y de participación. Sin embargo, no tiene personalidad jurídica propia, denuncia Valdivia.

Justo antes de unas elecciones

Valdivia señala el hecho de que la anulación de su presidencia se haga a días de nuestra próxima Asamblea, el 23 de junio, en la que se iba a votar próximos objetivos y presidencia. “Sin embargo, desde la Junta no han tenido reparos en modificar el censo justo antes de unas elecciones, ¡todo lo contrario al espíritu democrático!”.

“Se basan en faltas administrativos o fallos en el registro de la sede social”, abunda el ya expresidente del CJA, su cese se hizo efectivo el día 12. Asume que la vida orgánica de las entidades juveniles es muy corta, “las direcciones tienen ciclos de solo dos años, a menudo”. A modo de justificación por posibles irregularidades burocráticas, relata que la pandemia llevó a numerosas entidades a la desarticulación por falta de renovación en los puestos directivos.

“Entiendo que hay que renovar las entidades y que pueda haber fallos, pero simplemente necesitaban –desde la Junta de Andalucía–una excusa para intervenir el Consejo, por lo civil o lo criminal”. Desde la Junta confirman que la actualización del censo ha llevada a la baja de 17 asociaciones de ámbito regional desde 2022, Valdibia presume que “la mayoría serán de corte progresista”.

De vivienda mejor no hablar

El CJE es una entidad que venía basando su actividad en reivindicaciones juveniles, aunque eso no implica que todas las entidades fueran de ideología progresistas o de izquierdas. La última gran cita de la presidencia de Valdivia, “Las jornadas de Emancipación” contenían dos bloques temáticos: uno sobre igualdad y feminismo y otro sobre vivienda digna y salarios mínimos.

“Obviamente, la vivienda ha formado parte de nuestra agenda reivindicativa”, explica Valdivia, quien cree que iniciativas como la de proponer una recolecta de firmas bajo el lema: ‘¡JUANMA MORENO BONILLA, RESUELVE YA EL BONO JOVEN DE ALQUILER DE ANDALUCÍA!’ para responder a las demandas sin atender de los más de 17 mil jóvenes andaluces que esperan desde hace más de 7 meses la resolución de las ayudas.

Consultado Valdivia si cree que el perfil activista y combativo del CJA ha influido en su situación, dice que “es normal, la naturaleza de un Consejo juvenil es molestar. Y, en materia de vivienda, es normal que sean tan sensibles”.

El Bono de alquiler es la ayuda de 250 euros por un periodo de dos años, para jóvenes de entre 18 y 35 años y es, después de que tardaran 10 meses en abrir el periodo de solicitudes y la actual eternización de las respuestas, uno de los temas más recurrentes en el Parlamento de Andalucía.