La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) Madrid acudirá mañana viernes a la Asamblea de Madrid para denunciar "el abandono de los agricultores y ganaderos madrileños, agravado durante la pandemia", por lo que piden al Gobierno regional un plan urgente de apoyo al sector primario.

Concretamente, el secretario general de esta organización agraria, el agricultor cerealista Jesús Anchuelo, participará mañana por la tarde en la Comisión para la recuperación e impulso de la actividad económica y social, en la Asamblea de Madrid, donde enumerará sus propuestas para "salvar de la desaparición a los agricultores y ganaderos de la región".

Según explica, el sector agrario de Madrid ha perdido casi el 30 por ciento de sus tierras desde 1985, los regadíos se han convertido en secanos en un 74 por ciento, y las explotaciones ganaderas se han reducido un 30 por ciento en los últimos trece años. La media de edad de los profesionales del sector es de 65 años y 8 meses, "lo que demuestra el gravísimo envejecimiento que sufrimos".

El sindicato agrario también señala que el sector primario de Madrid representa apenas el 0,2 por ciento del PIB regional, pero gestiona el 56 por ciento del territorio. "El carácter esencial de la agricultura y la ganadería no tiene su reflejo en la Administración regional, que sistemáticamente ignora o incluso desprecia a los agricultores", explicará Jesús Anchuelo en la Asamblea.

"Madrid también es campo, pero desde la política es una realidad que se olvida de forma sistemática. Somos como una España en miniatura. Producimos de todo y con una enorme calidad, pero lo hacemos en un entorno hostil", ha indicado el secretario general de UPA.

Por eso, pedirá en el Parlamento regional ayudas directas que salven de la ruina a los sectores más afectados por la pandemia, como el ovino-caprino, el vacuno o el vitícola. A su vez, han solicitado la reapertura de los mercados de venta directa, cuyo cierre ha afectado fuertemente a los horticultores.

También reclamará la creación de un Comité Asesor Agrario de Madrid, potenciar los planes de desarrollo rural, para no perder los fondos que llegan de la Unión Europea, y un refuerzo del personal de la Administración para gestiones agrarias, "que sufre un grave déficit desde hace años".