El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha ofrecido su primera rueda de prensa desde la noche electoral el pasado noviembre. Tras meses sólo comunicándose por Twitter, cientos de periodistas estaban ansiosos de lanzar sus preguntas al magnate que será el nuevo presidente en pocos días.

Y Trump, fiel a su estilo, no ha defraudado y ha dejado una gran cantidad de titulares como que pedirá la construcción de un muro en la frontera con México y que ese país terminará pagándolo, "con impuestos o pagos" directos.

"No quiero esperar año y medio para hacer un acuerdo con México", afirmó Trump sobre su intención de urgencia de la construcción de un muro entre México y Estados Unidos, uno de sus principales lemas de campaña. "México pagará por el muro", insistió.

Desplante a la prensa

Como ya hizo durante la campaña electoral, Trump ha tenido un nuevo desplante contra un periodista, en este caso de la CNN, al que no ha dejado preguntar acusándole de lanzar noticias falsas por el informe publicado en el que se recoge que, según  un ex agente secreto británico, Trump habría contratado a varias prostitutas para que orinaran mientras él miraba en la cama de la misma suite presidencial del Hotel Ritz Carlton en la que se habían hospedado el presidente Obama y la primera dama, Michelle Obama, durante una visita a Moscú.

 

“Las agencias de inteligencia nunca deberían de haber permitido que esta noticia se 'filtrara' al público. El último disparo ha sigo contra mí. ¿Es que vivimos en la Alemania nazi?”, añadió hoy Trump, quien ya anoche tildó el informe de "noticia falsa" y consideró que era producto de una "total caza de brujas política".

En su cuenta en Twitter, Trump también citó la respuesta que el Kremlin dio hoy al informe, tachándolo de "absoluta falsedad".

Reconoce los ciberataques

La relación entre Moscú y Washington se encuentra en un momento especialmente tenso debido a que las agencias de inteligencia de EEUU afirman que el Kremlin orquestó una serie de ciberataques para influir en los comicios con el fin de favorecer a Trump y dañar a la excandidata presidencial demócrata, Hillary Clinton.

En la rueda de prensa, Trump ha reconocido que Rusia estuvo detrás de los ciberataques realizados en el proceso electoral que culminó con los comicios del 8 de noviembre.

“'Hackear' es malo, no tendría que haber ocurrido”, ha afirmado el presidente. “Sobre el ciberpirateo, creo que fue Rusia”, agregó, en una posición que cambia opiniones anteriores en las que se mostraba reacio a aceptar que Rusia estuviera detrás de estas acciones de pirateo informático, que afectaron especialmente al bando demócrata.