Gálvez es un pueblo toledano que de estar situado en Galicia definiría perfectamente el universo caciquil. Su alcalde, Manuel Lázaro, del PP, claro, acumula mayorías absolutas con rotundidad desde 1995. Tanto es así, que en algunos comicios ha logrado el 70 por ciento de los votos, siendo, por lo tanto, uno de los ediles más votados de España en localidades mayores de 3.000 habitantes. Servidumbre, amiguismo y enchufismo, como en numerosas ocasiones ha denunciado el PSOE, son el pan nuestro de cada día de este pueblo monteño, que el sábado sirvió de atrezzo para que la diputada nacional por Toledo y secretaria general de la formación conservadora, María Dolores de Cospedal, inaugurara el consultorio médico que desde este lunes estará ya operativo.

Protagonismo inmerecido

Esta noticia no pasaría de mera anécdota informativa a no ser por la condición de Cospedal de expresidenta del Gobierno de Castilla-La Mancha (2011-2015) y su visceral rechazo y negativa a financiar la construcción de nuevos consultorios médicos, dispensarios y centros de salud durante su mandato, entre otros el de Gálvez. Aún es más, la secretaria general del PP cerró plantas hospitalarias, despidió a cientos de médicos y enfermeras y paralizó la construcción de hospitales. Tuvo que ser, una vez más, el Tribunal Superior de Justicia de la región el que le parara los pies y tumbara sus intenciones de clausurar las necesarias urgencias nocturnas existentes en la comunidad, o la anulación de la reordenación de médicos llevada a cabo por el Partido Popular en los hospitales de Almansa y Villarrobledo, entre otros rapapolvos judiciales. De ahí que la inauguración del consultorio, que protocolariamente no le correspondía, chirríe, y de qué forma, al mismo tiempo que sitúa al alcalde de esta localidad como uno de los dirigentes del PP más serviles, siempre dispuesto a contentar a “la lideresa, desparecida de Castilla-La Mancha desde el mismo día que perdió la presidencia del Gobierno regional”, concretan fuentes socialistas consultadas por ELPLURAL.COM.

“El PP no quiere más médicos”

Y llama la atención porque, además, en declaraciones a este periódico de la vicesecretaria y portavoz del PSOE de Castilla-La Mancha, Cristina Maestre, “al PP les parezca mal que se contraten más médicos o enfermeras o que se firme un pacto con empresarios y sindicatos en favor de nuestra región”, añade, “mientras el presidente Page trabaja por recuperar al región, Cospedal conspira contra los intereses de la comunidad”. Declaraciones basadas en las “amenazas” de Rajoy para que García-Page reduzca al 50 por ciento la Oferta Pública de Empleo que en materia de sanidad. Decisión, siempre según el Gobierno castellano-manchego actual del PSOE, avalada por las presiones de Cospedal, que “en lugar de actuar con objetividad se deja llevar por Cospedal, que tiene interés en que los destrozos de su mandato en la región se mantengan”, asegura el consejero de Hacienda, Juan Alfonso Ruiz Molina, a la vez que se lamenta de que “vamos a sufrir más con que se haya marchado que si se hubiera quedado”.

Situación “vergonzante y vergonzosa”

El caso es que la inauguración, “inmerecida e inmoral” de María Dolores de Cospedal del consultorio de Gálvez, ha levantado ampollas entre los que trabajan en la actualidad para “reparar los destrozos del PP en materia sanitaria”, asegura uno de los actuales coordinadores del Gobierno de Page, Francisco José García, quien tiene claro que durante cuatro años tanto Cospedal como  su Gobierno no invirtieron en infraestructuras sanitarias en la Comunidad. Más bien “paralizó las obras de los hospitales de Albacete, Toledo, Cuenca y Guadalajara y ahora cuando está fuera del Gobierno acude a un municipio de Castilla-La Mancha donde se ha hecho una inversión por parte de otras administraciones como la Diputación de Toledo y el SESCAM”, ha afirmado García, concluyendo que “me parece una situación vergonzante y vergonzosa para ponerse galones”.

Dinero público para la gloria de Cospedal

Por su parte, fuentes del PP defienden ante este periódico la “legalidad” de la inauguración del consultorio por parte de Cospedal, “ya que ha sido Manuel (como si el dinero hubiera salido de su bolsillo) el que ha pagado la construcción del centro y no García-Page”, aseguran, faltando en parte a la verdad, ya que el alcalde “Manuel” (como le llama nuestro interlocutor) se ha servido de la subvención recibida por parte de la anterior corporación de la Diputación de Toledo, de la que él era un destacado diputado bajo las órdenes del controvertido líder Arturo García-Tizón. En este sentido, las fuentes socialistas instan al alcalde de Gálvez a que “también pague a los médicos, a las enfermeras y todo el material sanitario necesario para prestar un servicio que con Cospedal fue desmantelado sin miramientos, y ahora tiene la cara dura de inaugurar un consultorio que nunca apoyó, concluyen. Es cierto, si el Ejecutivo de Page no pagara las nóminas de estos profesionales, “el consultorio de Cospedal” no podría abrir las puertas este lunes.