“Habrá una representación de la Comunidad de Madrid del más alto nivel, pero reducida, yo y el consejero de Presidencia (Ángel Garrido)”. Palabras de Cristina Cifuentes poniendo el balón de la austeridad en juego cara a la final de Milán. Porque lo que venía la presidenta de la Comunidad a dejar claro así, y presumir de ello, es que no habrá una gran delegación oficial: ni comitiva de altos cargos, ni familiares.

Cifuentes y su jefa de Gabinete se pagan el hotel

En realidad no es así. Va más gente con Cristina Cifuentes. Al menos, que sepa este periódico, un alto cargo más, porque con ella, Cifuentes se lleva a su más que mano derecha, Marisa González. “Pero ella no va al palco del partido -nos dicen-, porque no va sino para coordinar los actos informativos de la Presidenta”.

Es de imaginar que no se refieren sólo a canutazos, sino a entrevistas que haga la presidenta como tal, con la excusa de que la Comunidad va a instalar una carpa promocional de los productos y los lugares más emblemáticos de Madrid como destino turístico.

La presidenta y su jefa de Gabinete, que viajan en línea regular, tienen previsto quedarse en Milán alguna noche. “Pero el hotel de esas noches lo pagarán ellas”, nos aseguran en Presidencia del Gobierno madrileño.

El nieto de Carmena y Aguirre

También ha habido ‘lío’ con la delegación del Ayuntamiento para la final madrileña. En este caso, porque la alcaldesa, que primero insinuó que no iba a ir, decidió después sustituir a su marido por su nieto.

El amago de Carmena de no estar presente en el partido provocó una reacción inmediata de la implacable Esperanza Aguirre: “es impresentable”, dijo de la supuesta decisión. Una reacción tan poco medida, que ahora, cuando la alcaldesa ha echado marcha atrás y ha anunciado que sí irá, Aguirre no sólo no ha criticado la presencia del nieto, sino que la ha alabado: “bien por el nieto que ha convencido a su abuela de que vaya a representarnos a todos”.

En efecto, parece que el nieto de Carmena, que tiene 16 años y, según la alcaldesa, “es muy fan”, ha jugado papel fundamental como dijo ella misma, sabida su poca pasión futbolera, en Marca: “lo que sí me haría ilusión es poder llevar a mi nieto, que tiene una ilusión enorme, porque es forofo del Real Madrid”.

Esta vez, Ahora Madrid no va a cumplir con su decisión de ceder toda entrada VIP, como han hecho en otras ocasiones -desde los San Isidro a otros espectáculos deportivos como el Madrid Open de tenis-. Pero Carmena tiene fácil explicación, ahora sí va en representación de la ciudad.