Durante los últimos 4 meses el Gobierno filtraba con antelación los datos del paro registrado que se hacen públicos el primer miércoles de cada mes. La cosa se llegó a ver con tanto optimismo que en los dos últimos meses era el mismísimo Rajoy quien lanzaba con días de antelación el mensaje de que los españoles tendríamos muy buenas noticias sobre el paro. Curiosamente en esta ocasión nadie del Gobierno, y mucho menos Rajoy, hicieron premonición alguna. Mal dato del paro en agosto y no solo por la tradicional avalancha de despidos que se produce cada 31 de agosto como fin de la temporada turística, aunque estrictamente hablando ésta se prolonga hasta el 15 de septiembre. El paro subió el mes pasado el triple que en agosto del año pasado pero, además, si se descuenta la estacionalidad subió en 13.982 personas. Los datos de cotizantes a la Seguridad Social son rotundos: al finalizar agosto la afiliación descendió en 134.289 personas.

Se vuelve a destruir empleo
Los datos arrojan conclusiones claras, la primera que la economía española no crea empleo, la segunda que los nuevos contratos no compensa el número de los que finalizan y la tercera que la economía vuelve a destruir empleo y no solo por razones estacionales vinculadas al fin de la temporada turística.

La  elevadísima temporalidad y estacionalidad del empleo en España da cuenta de que en un sólo día, el 31 de agosto, la Seguridad Social perdió 197.324 cotizantes. Descontadas las altas que hubo en agosto la Seguridad Social perdió en el conjunto del mes 134.289 cotizantes, por tanto son casi 14.000 cotizantes menos independientemente de la temporada turística.

En 2014 crecieron los afiliados a la Seguridad Social
Es necesario poner perspectiva en los datos y si se comparan los datos con agosto del año pasado la conclusión es aún más negativa. En agosto de 2014, con un crecimiento económico mucho menor, no sólo no bajó el número de cotizantes a la Seguridad Social sino que creció en 18.622 personas. El pasado mes de agosto fue el peor de los últimos tres años, dado que sin desestacionalizar los datos en 2013 se perdieron 97.582 cotizantes, el año pasado 99.069 y este año 134.289.