El exconsejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid Manuel Lamela atiende a los periodistas tras el acto en el que tomaron posesión los nuevos consejeros del Ejecutivo madrileño. EFE/Archivo El exconsejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid Manuel Lamela atiende a los periodistas. EFE/Archivo

 

 


El Ministerio de Sanidad ha adjudicado a la consultora de Manuel Lamela, uno de los exconsejero de Sanidad, junto con Juan José Güemes, actualmente imputado por tráfico de influencias y prevaricación, el contrato para llevar a cabo la privatización de la gestión del hospital de Melilla. Fuentes del Ministerio, que dirige Ana Mato, han justificado a la Cadena SER que no sabían que la empresa elegida fuera de Lamela.

La pretensión de Sanidad es que los hospitales de Ceuta y Melilla, los únicos que dependen orgánicamente del ministerio, pasen a ser gestionados por las denominadas Unidades de Gestión Clínica, con un modelo de gestión y laboral similar al de empresas privadas. De hecho, para la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública el plan de Ana Mato no es más que “una privatización encubierta para dar una entrada discreta al sector privado".

Se beneficia a personajes vinculados a la actual administración
Los médicos han advertido de que con el nuevo modelo se someterán las decisiones clínicas y “el cribado de pacientes” a “las políticas empresariales” y “criterios de rentabilidad". La Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública ha explicado que las farmacéuticas, multinacionales sanitarias o fondos de capital riesgo podrán gestionar los centros sanitarios "a cambio de aportar recursos y capitalización" por lo que estas Unidades "sólo beneficiarán a empresarios, laboratorios, consultoras y a personajes vinculados a la actual administración que participen en la llamada puerta giratoria".

Una escandalosa adjudicación
Si es escandaloso el plan privatizador de Ana Mato para las ciudades autónomas, no lo es menos que la ministra adjudique el contrato para llevarlo a cabo a la empresa de Manuel Lamela, Business Assesstemt Plans and Projects Healthcare SL (BAPPH). El exalto cargo del Gobierno de Aguirre está imputado por tráfico de influencias y prevaricación durante el proceso de privatización de la Sanidad madrileña, ya que, como ELPLURAL.COM ha publicado en más de una ocasión, supo sacar provecho de las privatizaciones de hospitales madrileños que él llevó a cabo, como fue el caso del hospital de Aranjuez, cuya externalización de servicios aprobó en 2005 como consejero para luego, ya fuera de Sanidad, pasar a formar parte del Consejo de Administración de una de las adjudicatarias. El exconsejero supo aprovechar bien sus contactos para montar un entramado de sociedades vinculadas a la sanidad privada.

Para la privatización de servicios en el hospital de Ceuta, Sanidad ha elegido a la empresa Mensor Asesores, formada por profesionales provenientes del sector público.