El juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz, instructor del caso Gürtel, antes de pronunciar una conferencia sobre "Blanqueo de capitales cometido por una organización criminal", en una jornadas profesionales en Las Palmas de Gran Canaria / EFE



El PP ha recurrido ante la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional su expulsión como acusación popular en el caso Gürtel con un escrito en el que arremete contra el juez Pablo Ruz instructor de esta causa, y contra la Fiscalía Anticorrupción, acusándoles de vulnerar la Constitución y de haber tomado una decisión “premeditada” y “arbitraria”, según adelanta la SER.

Acusa al juez de "prejuzgar"
En sus alegaciones el Partido Popular afirma que tanto el fiscal como el juez van de la mano y “se aferran a cualquier excusa” para "prejuzgar" la situación del partido y "apartarle como sea" del proceso, utilizando argumentos que no son "mínimamente razonables" ni "ajustados a derecho", según asegura.

Un juez "sarcástico"
En el caso particular del juez Castro, el PP le tilda de "sarcástico" y le reprocha que en el trámite de alegaciones previas nada dijera de los argumentos con los que fundó la expulsión. También sostiene que con su decisión ha provocado una "gravísima e inadmisible" situación de "indefensión" en la formación política.

A la razón expuesta por el juez para no admitirle como acusación popular por actuar como defensor de imputados, el PP defiende que cuando lo hizo así no tenía todos los datos y que en cualquier caso, no iban a "acusar por acusar".

Desacredita los papeles de Bárcenas
En su escrito, el PP también insiste en calificar los papeles de Bárcenas como "fotocopias burdamente manipuladas" a pesar de que la policía ha acreditado que la letra es del extesorero del PP. En este sentido, el Partido Popular agrega en su escrito que esta formación política ha mostrado "su indignación" tras conocer las cuentas en Suiza y ha manifestado su voluntad de que la investigación llegue "hasta las últimas consecuencias".

Ataques a El País y al PSOE
Con su recurso, el PP extiende su ofensiva sobre el juez, después de sus ataques contra el PSOE y el diario El País (reveló los papeles de Bárcenas), a los que ha acusado de llevar una campaña conjunta para dañar su “reputación, el buen nombre y el honor del partido y sus dirigentes”, según afirmó en el escrito remitido al juez Ruz el mes pasado después de que este rechazara incluirle como acusación.