La Revuelta se va de vacaciones de Navidad por todo lo alto, recibiendo una visita inesperada que dejó atónitos tanto al público como al propio presentador, David Broncano. En su última emisión, este jueves, el programa contó con la invitada especial Silvia Alonso, intérprete y pareja del presentador, quien se convirtió en la protagonista de la noche gracias a su humor y espontaneidad, logrando ganarse el cariño del público.

La actriz explicó que su presencia se debía a un contratiempo ocurrido en el especial navideño del programa, programado para ser grabado el pasado martes, pero que finalmente tuvo que ser cancelado debido a un problema de salud del invitado principal, el histórico cantante Raphael: “Sabéis que aquí se intentó grabar un especial de Navidad que no se pudo hacer por el problema de salud de Raphael, pero la invitada que iba después de él era yo. Por tanto, me fui para mi casa y no pude promocionar lo que iba a promocionar, pero no pasa nada porque Raphael está bien”, concluyó la actriz.

Seguidamente, Silvia Alonso se dirigió a cámara para enviar un saludo al icónico cantante con un tono humorístico: “Seguro que no sabe quién soy, pero me alegro de que esté bien y le mando un beso”.

Continuando con el tono cómico que caracteriza al programa, Alonso mandó callar a Broncano, lo tomó de la mano y lo sentó en el sillón de invitados, provocando las risas del público. “¡No me trates como un muñeco! Estaba en una cosa de prensa, pero me he escapado porque hoy es el último programa y, si no, no podía volver”, dijo mientras se dirigía a la mesa del presentador para mostrar el cartel de su nueva película, Sin instrucciones.

Además, la intérprete pidió a Guiño, el rigidor de La Revuelta, que pusiera el tráiler de la película. A esto, Broncano respondió en tono humorístico: “¿Pero qué eres, la directora del programa?”.


El programa cierra con una posible pedida de mano

Finalmente, Alonso le comunicó a Broncano que tenía un regalo para él, siguiendo la tradición de que los invitados lleven obsequios al programa. Sin embargo, la actriz advirtió que se lo entregaría más tarde en el camerino.

El público, emocionado, comenzó a pedirles que se besaran e incluso que el presentador le propusiera matrimonio, pero Alonso zanjó el momento con humor: “¡No hay tiempo!”.

Antes de despedirse, lanzó una frase con un guiño a las típicas preguntas del programa: “Nada más, que este mes he follado poco y más de cien. ¡Os quiero!”.