Durante la boda de este sábado de la aristócrata Tamara Falcó y su pareja Íñigo Onieva, los novios quisieron tener con los medios de comunicación, que esperaban a las puertas del lugar de la celebración bajo el sol abrasador de julio, un gesto amable en forma de comida y bebida. No obstante, este detalle con los reporteros quedó eclipsado cuando los periodistas vieron el uniforme que llevaban las camareras que trabajaban en el enlace.

Gema Fernández, que formaba parte de este grupo de profesionales de la comunicación, quiso compartir el gesto de Falcó y Onieva a través de sus redes sociales, publicando en sus stories de Instagram un breve vídeo en el que se apreciaba cómo los camareros del evento ofrecían comida y refrescos a los periodistas y fotógrafos allí presentes. En las imágenes se observa que esta muestra de cortesía fue muy bien recibida por los profesionales, quienes agradecían el buen trato.

Sin embargo, lo que podría haber quedado en tan solo un acto de generosidad de Tamará Falcó con los medios se conviritió en polémica por lo que muchos interpretaron como clasismo latente aún existente en nuestro país. Y es que los uniformes elegidos para que vistieran los camareros y camareras durante la ceremonia recuerdan a tradiciones basadas en la desigualdad más propias de otro siglo, lo que ha generado multitud de críticas en las redes sociales. Los usuarios, al ver la vestimenta de la camarera que aparecía en la publicación de Gema Fernández, no han podido sino indignarse con los novios y los organizadores de la boda.

El atuendo en cuestión tiene un innegable estilo que evoca los uniformes de las criadas que trabajaban en las casas de familias adineradas durante los comienzos del siglo XX. Una época en la que las normas sociales y laborales diferían considerablemente de las actuales, pues no se respetaban los derechos de los trabajadores. Es por esto, que han sido muchos los internautas que han interpretado la elección de esta indumentaria como una manera de menospreciar a los camareros, y de ensalzar la 'posición social' de los invitados.  

"¿Esto que es una imagen de 2023 o de 1903?" se ha preguntado uno de los usuarios a través de Twitter al ver las fotografías. "La indumentaria de las camareras en la boda de Tamara Falcó e Iñigo Onieva es de la época del pensamiento de muchos de los invitados", ha comentado otro. Siendo estas solo el comienzo del aluvión de críticas que ha recibido la pareja en las redes sociales en las últimas horas.

"Así iban vestidas las camareras en la boda de Tamara Falcó. De sirvientas de época, con manga larga y medias tupidas negras en pleno julio" ha denunciado una usuaria este domingo, "pero es que Tamara Falcó es tan cuqui y graciosa", añadía en tono irónico.

"¿Downton Abbey?" se pregunta otro internauta haciendo referencia a la serie que sigue la vida de la familia aristocrática Crawley y sus sirvientes entre 1912 y 1926. "No", responde, "la boda de Tamara Falcó, en pleno julio. Porque las clases sociales hay que dejarlas muy claras", critica finalmente.

"¿Cómo de superior tienes que creer que eres respecto a los demás, para que te parezca bien tener a las camareras de tu boda vestidas así?" se cuestionan desde otro perfil de Twitter.

No es la primera vez que Falcó se ve envuelta en polémicas que la retratan como intolerante o clasista. No obstante, aún no ha habido respuesta ni de la pareja ni de la organización del evento que expliquen la elección de ese tipo de uniforme.