La periodista Àngels Barceló ha comenzado este lunes su programa Hoy por Hoy desde París después de la victoria de Emmanuel Macron frente a la ultraderechista Marine Le Pen. La informadora ha celebrado el resultado de los comicios, a través de los cuales el candidato que ya se postulaba como favorito tras la primera vuelta ha resultado finalmente reelegido para situarse al frente del Elíseo.

Europa festeja en gran medida este resultado, ya que el tono antieuropeísta de Le Pen es evidente, más allá de los valores ultranacionalistas que encarnan tanto ella como Agrupación Nacional. Sin embargo, el sentimiento es agridulce, ya que las urnas han devuelto en forma de votos un ascenso de la formación ultra. De hecho, el partido con el que en España ha simpatizado abiertamente y en varias ocasiones el de Santiago Abascal ha logrado el mejor resultado de su historia.

Europa respira aliviada. Emmanuel Macron fue ayer reelegido presidente de la república francesa”, ha dictado Barceló. “Marine Le Pen no lo consiguió, pero la ultraderecha alcanzó el mejor resultado de su historia”, recuerda.

Son muchos los políticos, periodistas, artistas y un largo etcétera los que, tras la resaca electoral del país vecino se han congratulado después de que Macron se proclamase de nuevo vencedor cinco años después,  mientras llaman a no bajar la guardia.

Distancia inferior entre candidatos y gran abstención

Son varias las conclusiones que se extraen de Francia, algunas de ellas bien podrían extrapolarse a otras partes del continente. Más allá de que en cada país las elecciones sean diferentes y también los votantes -especialmente por historia y/o tradición- el territorio galo evidencia que, por el momento, Europa quiere prevalecer frente a los extremos.

No obstante, también muestra un descontento generalizado de la población con la política actual. Prueba de ello fue que la diferencia de votos entre los dos partidos finalistas fue mucho menos amplia que en 2017, cuando la distancia superó los 30 puntos (66,1% frente a 33,9%). En el día de ayer, el candidato de República en Marcha (LREM) obtuvo entre el 57 y el 58% de los votos.

Además de éste, otro hecho que ha marcado claramente los comicios ha sido la amplia abstención; que llegó al 28% según Ipsos. O lo que es lo mismo, el porcentaje más alto desde 1969.