La incongruencia absoluta, envuelta en un halo de machismo recalcitrante, se ha evidenciado esta tarde en el pleno extraordinario del Consejo General del Poder Judicial, en el que se debía votar a los dos magistrados que el órgano de Gobierno de los jueces debe designar para el Tribunal Constitucional. Un vocal, José María Macías, ha emitido un voto particular acusando a la vocal Clara Martínez de Careaga de ser la culpable de que no haya habido acuerdo. Su delito: estar casada con un magistrado del TC, Cándido Conde-Pumpido, y no abstenerse en el pleno. La culpa de ella por ser mujer de Conde-Pumpido, pero nada de decir que han tratado de imponer a sus dos candidatos y que, ese hecho ha sido el que ha hecho fracasar el pleno. Al voto particular de Macías se han unido otros vocales designados por el Partido Popular como son Carmen Llombart, Gerardo Martínez Tristán, José Antonio Ballestero y Ángeles Carmona.
Pero, lo que este lunes era bueno para todos los conservadores, que los magistrados del Constitucional Pedro González Trevijano y Antonio Narváez no se abstuvieran de la petición de recusación que les afectaba y, por tanto, pudieran votar si se recusaban a ellos mismos, aunque fueran juez y parte, hoy no valía para Martínez de Careaga.
Es más, en el voto particular se llega a acusar a esta magistrada del Tribunal Supremo de ser la culpable de que, el CGPJ no haya elegido a los dos magistrados para el TC. El escrito, al que ha tenido acceso ElPlural.com afirma: “De haber cumplido la vocal Clara Martínez de Careaga el deber legal de abstención que le afectaba, los candidatos D. César Tolosa y D. Pablo Lucas habrían sido efectivamente designados magistrados del Tribunal Constitucional, condición que creo que legítimamente les tendría que corresponder”.
Es decir, que el intento de toma de la Bastilla hecho por los conservadores de tratar de colar a sus dos candidatos, en contra de la norma no escrito que siempre se ha mantenido en el consejo: cada bloque designa un candidato, es culpa de esta mujer. La pregunta que surge es evidente ¿hubieran tratado de sacarla de la votación si en lugar de llamarse Clara se hubiera llamado Pedro?
