El Ministerio de Sanidad quiere que este miércoles el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud tome una posición conjunta entre el Gobierno central y las comunidades autónomas en cuanto a las recomendaciones y restricciones para esta Navidad marcada por la pandemia del coronavirus.

Según avanza El País, se estudia ampliar a 10 personas el límite en las reuniones, tal y como proponen Cataluña, País Vasco y Madrid, desestimando así la propuesta del Ministerio que se mantenía en seis.

Además, para limitar los movimientos sin impedir que las familias que viven separadas puedan verse, el ministerio valora la posibilidad de mantener los confinamientos perimetrales en las comunidades con una excepción: viajar solo si es por reagrupación familiar.

El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha advertido este martes en la sesión de control al Gobierno en el Senado que las medidas que se aprobarán para Navidad harán en esta ocasión se traten de unas fiestas “diferentes”.

“Diciembre es un mes que ve incrementada de forma notable tanto la movilidad como los contactos sociales. Y son los dos vectores de transmisión del virus. Por eso espero que en la reunión ordinaria que mantendremos en la Interterritorial podamos acordar medidas (...) Ya les anticipo que tendrán que ver con aspectos de movilidad, de contactos sociales y de estas actividades de toda índole que se hacen en estas fiestas y que tienen que hacerse de forma distinta a como venimos haciendo en años anteriores”, ha afirmado mientras pedía “muchísima prudencia ante las fiestas de Navidad”. En palabras del ministro, la situación epidemiológica “sigue siendo preocupante aunque mejore”.

Dos semanas de reuniones

Según cuenta el citado medio, los técnicos del ministerio y las comunidades llevan dos semanas de reuniones para acordar un marco común, pese a que no tiene por qué ser igual en todas las autonomías ya que cada territorio cuenta con una evolución de la pandemia diferente.

La semana pasada, Sanidad enviaba a las consejerías de salud una propuesta para trabajar en medidas concretas entre las que se encontraban la limitación de las reuniones a seis personas y un toque de queda a la una de la madrugada en los días de Nochebuena y Nochevieja.

Sin embargo, Madrid elevó a 10 el número de personas a las reuniones y hasta a 1.30 el toque de queda. Galicia pedía que no se contara a los niños en el límite de seis personas y, por su parte, Cataluña y Euskadi pedían unos días más tarde que el límite se fije en diez personas.

El ministerio ha respondido buscando una medida común: aumentar a 10 el número de personas reunidas y llevar el toque de queda a la 1.30 los días 24 y 31. Sin embargo, no hay nada cerrado.