La Iglesia católica española se someterá a una auditoría independiente sobre los abusos sexuales a menores cometidos en su seno, según ha informado la Conferencia Episcopal Española en un comunicado. Será un bufete de abogados el encargado de fiscalizar el asunto. El presidente de la Conferencia Episcopal, el cardenal Juan José Omella, y el presidente de la firma legal Cremades&Calvo Sotelo, Javier Cremades, darán a conocer los detalles de esta auditoría este martes 22 de febrero. 

El despacho profesional abrirá un cauce independiente para recibir eventuales denuncias, revisará los procedimientos jurídicos tendentes a sancionar las prácticas delictivas y ofrecerá su colaboración a las autoridades para ayudar a esclarecer los hechos y establecer un sistema de prevención que satisfaga las demandas sociales al respecto, según han informado las partes en un comunicado.

Investigaciones paralelas

El gesto de la Conferencia Episcopal llega en un contexto en que la Iglesia será examinada con lupa. Y es que, el PSOE ha propuesto que el Defensor del Pueblo, dirigido por Ángel Gabilondo, comande una investigación al respecto. Por tanto, se espera que ambas investigaciones se concreten en paralelo.

Víctimas de abusos sexuales cometidos en la Iglesia han mostrado su respaldo para poner también en marcha una comisión de investigación en el Congreso, también se muestran favorables a que el Defensor del Pueblo continúe esos trabajos. De esta forma, exhortan a las distintas formaciones políticas que logren un acuerdo que, desde un proceso de escucha con comparecencias, pueda determinar las "responsabilidades oportunas" para que España deje de ser una "anomalía" en Europa a la hora de esclarecer estos abusos Así lo establecen en un manifiesto, que rubrican un grupo de víctimas entre los que destacan Alejandro Palomas y miembros de colectivos como la Asociación de Víctimas de Abusos de Navarra, la Fundación Vicky Bernabet o la Asociació Mans Petites.

Unidas Podemos, ERC y Bildu acordaron dar tiempo al PSOE para que decida sobre la tramitación de su petición de que sea el Congreso quien investigue y esclarezca los episodios de abusos en el seno de la Iglesia que se vienen denunciando desde hace años. Los socialistas por su parte registraron una iniciativa que apuesta por unas pesquisas dirigidas por el Defensor del Pueblo y ahora estos grupos parlamentarios negocian para poder consensuar una postura común.